El Sevilla FC se dio un baño de masas en la mañana del pasado 5 de enero, en el entrenamiento abierto al público en el Sánchez-Pizjuán, que la plantilla espera que le sirva para renovar la ilusión y dar carpetazo definitivo a la crisis que arrastró durante prácticamente todo el 2022. La Navidades de 2021 dibujaban a un equipo pletórico que se coronaba subcampeón de invierno en LaLiga y competía codo con codo por el título con el Real Madrid. Sin embargo, una plaga de lesiones hizo desinflarse al equipo hasta el punto de sufrir mucho para poder ser cuarto y esa misma tónica le siguió acompañando en el inicio de la 22/23, provocando el despido de Julen Lopetegui y el regreso de Jorge Sampaoli, que no ha podido evitar el amargo trance de iniciar este nuevo año recibiendo al Getafe CF desde los puestos de descenso de la clasificación.
La victoria del Cádiz CF en Valencia (0-1), además, hace bajar una posición más al Sevilla FC, que ahora es penúltimo con 12 puntos y a tres de la salvación. Pese a ello, un triunfo en la tarde de este domingo frente a su público ante el Getafe le permitiría salir del pozo en esta jornada 16 gracias a su mejor balance de goles con respecto a sus vecinos de la Bahía.
Para este primer encuentro liguero de 2023, Sampaoli no podrá contar con los lesionados Marcao, Rekik, Telles, Delaney, Tecatito Corona y Papu Gómez, además de con los sancionados José Ángel Carmona -expulsado en Vigo- y Gonzalo Montiel, que debe cumplir el tercero y último de sus encuentros de castigo por la roja que vio en el derbi del 6 de noviembre. A cambio, recupera a Nianzou y Rakitic y podría convocar por primera vez al refuerzo invernal Loïc Badé, que se puso a disposición del técnico argentino, quien muy a su pesar no podrá hacer muchas rotaciones con respecto al equipo que goleó al Linares (0-5) en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey.
A priori, uno de los pocos cambios con respecto a Linares llegará en la portería, donde Yassine Bono, el pasado Zamora de LaLiga, recuperará su titularidad en detrimento de Marko Dmitrovic. No hay muchas opciones posibles para los acompañantes del marroquí, ya que los campeones del mundo Jesús Navas y Marcos Acuña son los únicos laterales disponibles y para el eje tampoco hay mucho donde elegir.
En este sentido, la principal duda reside en si Sampaoli mantendrá el 1-3-4-2-1 que ensayó durante el largo parón liguero o apostará por defensa de cuatro como en la Copa. Gudelj y Nianzou, que cumplió en Vigo su partido de sanción, apuntan a fijos pase lo que pase, con Fernando Reges como opción para hacer de bisagra entre sistemas, más allá de que Loïc Badé pueda disfrutar de sus primeros minutos en función de cómo avance el choque y de que Kike Salas se ganase un poco más al míster tras su salvador gol en Balaídos.
Si Fernando actúa en la parte defensiva, Joan Jordán y Óliver Torres se disputarían el puesto de acompañantes de Ivan Rakitic. El croata es uno de los fijos para el partido contra el Getafe, ya que como Nianzou no pudo jugar en Vigo y Sampaoli no anda sobrado de posibilidades para rotar.
Los tres salieron de inicio ante el Linares, por lo que eso no serviría de pista para saber quiénes serían los elegidos por el técnico argentino en este decisivo encuentro correspondiente a la jornada 16, la primera de 2023.
Youssef En-Nesyri ha vuelto enchufado del Mundial tras hacer historia con Marruecos y se reivindicó con un 'hat-trick' en el duelo copero, por lo que merece seguir. Paradójicamente -ha pedido un delantero y un extremo-, en la zona de arriba es donde más opciones tiene Sampaoli, ya que Erik Lamela y Suso se recuperaron y Rafa Mir lo está haciendo bien como 'falso extremo'.
A ellos cabe añadir el siempre eléctrico canterano Carlos Álvarez. Aunque Sampaoli no quiere cargar a los jóvenes con la presión de sacar al Sevilla FC de la zona de descenso, tanto el menudo atacante como sus compañeros Nacho Quintana y el mediocentro Pedro Ortiz lo han hecho muy bien en las contadas oportunidades que han tenido y han demostrado que se puede contar con ellos.