Álvaro Palomo3 min lecturaTanto Sevilla como Betis han levantado la voz contra los árbitros en la presente temporada al salir perjudicados por múltiples decisiones que en su momento causaron mucha controversia y lo cierto es que no les ha faltado razón, pues en ambos casos han resultado agraviados.
Dentro de este contexto del daño que el estamento arbitral ha provocado a los dos equipos hispalenses emerge un polémico dato que resulta muy significativo y que sitúa a ambos en el pozo de una tabla junto al Almería, lo que obviamente va muy en contra de sus intereses en el campeonato liguero.
Y es que, como apunta la cuenta @LaLigaenDirecto, nervionenses y heliopolitanos se erigen en dos de los equipos con peor promedio entre penaltis favor y en contra de LaLiga, al que se sumó el Sevilla después de sufrirlo nuevamente en el partido contra la Real Sociedad.
De ese modo, los donostiarras se metieron en el choque al borde del descanso merced a una pena máxima decretada por el colegiado Busquets Ferrer por golpear el balón en el brazo de Sergio Ramos. Una acción muy protestada por lo blanquirrojos que obtuvo la confirmación desde la Sala VOR. Finalmente, no fue decisivo, pues el Sevilla se impuso por 3-1, pero pudo serlo.
Con este penalti, el Sevilla ya ha sufrido cuatro penaltis en contra en lo que va de temporada, mientras que a favor solo le han pitado uno, lo que supone un déficit de -3, el tercero más alto después del registrado por el colista, un Almería con nueve en su contra y solo uno a favor, y por el Betis.
Así las cosas, los nervionenses solo han disfrutado de una oportunidad desde los once metros, más concretamente en el choque contra el Alavés en el Ramón Sánchez-Pizjuán del 12 de enero del presente año. Pena máxima transformada por Ocampos, pero que no sirvió para puntuar.
El Betis se encuentra en una situación muy similar a la de su eterno rival, incluso peor, y ocupa la penúltima posición en esta clasificación en negativo, pues también ha tirado un solo penalti en este curso, mientras que le hn pitado cinco en su área, lo que conlleva un promedio negativo de -4.
El único penalti del que ha gozado a favor fue el día que Isco, que lo transformó, cayó lesionado de gravedad, es decir en la cita contra el Getafe en el Benito Villamarín el 4 de febrero, por lo que tuvo que esperar más de media temporada para estrenar su casillero.