Jesús Navas se ha reciclado por enésima vez cuando sólo falta un mes y medio para que cumpla los 37 años. Campeón del mundo y de Europa con la selección española, ganador de siete títulos con el Sevilla FC y de otros tres con el Manchester City. Con 853 partidos oficiales a sus espaldas, 609 como blanquirrojo. Su palmarés habla por sí solo, pero el 'Duende' demuestra día tras día que además de una leyenda aún es un futbolista de muchísimo presente. La pujanza del canterano José Ángel Carmona ha relegado al banquillo al capitán, que ha reaccionado ofreciéndose para solucionar otra difícil papeleta para Julen Lopetegui.
Navas se fue del Sevilla FC en el verano de 2013 tras brillar como extremo en el Sevilla FC y en la mejor selección española de la historia. Sin embargo, cuando volvió en 2017 se topó con un agujero en el lateral derecho que, ni corto ni perezoso, se dispuso a tapiar. Tan bien lo hizo, que incluso regreso a las listas de España como carrilero diestro y ha permanecido el último lustro sin salir del carril del '2'.
Navas ha sido lateral por necesidad del equipo, por compromiso y profesionalidad, pero qué duda cabe que su sitio ideal está un poco más adelante, donde su efectivo regate en seco y su proliferación de centros se convierten en un arma poderosa al servicio del Sevilla FC. Además, jugar más arriba le genera mucho menos desgaste, cosa que tampoco es baladí por mucho que la resistencia física del palaciego sea espectacular a pesar de sus casi 37 años. Da la sensación de que su trayectoria puede alargarse más siendo extremo que actuando de lateral, con muchos más metros para cubrir y recorrer. Además, cuando juega de atacante, el lateral que está a su espalda lo nota. Y si no, que le pregunten a Dani Alves.
Con Carmona adueñándose del costado derecho de la zaga y con la presencia de Gonzalo Montiel, todo un campeón de la Copa América e internacional con Argentina, no hay motivos para que el capitán no regrese a su hábitat natural. En Villarreal, aprovechando la baja por sanción de Lamela, Lopetegui apostó por Navas como extremo por delante de Suso o Januzaj y le salió bien. El '16' se mostró activo en el tramo inicial y participó en la acción del 0-1, filtrando un pase para Isco, quien luego asistió a Óliver Torres. Luego acabaría de lateral, pero el debate ya está sobre la mesa.
Al término del encuentro ante el Villarreal, Navas fue preguntado por todo ello y, aunque siempre disciplinado y al servicio de lo que necesite el Sevilla FC, no esconde su predilección por la que ha sido su demarcación toda la vida. "La de extremo es una posición que conozco muy bien, en la que me encuentro muy cómodo, pero lo que toca es seguir ayudando al equipo en cualquier parte del campo, porque lo importante es el trabajo que hagamos todos para el equipo", manifestó el capitán en los medios del club.
"El equipo ha trabajado bien, en un partido difícil y con varias lesiones. El equipo lo ha dado todo y hemos tenido nuestras opciones, con varias opciones para hacer el segundo. Hay que quedarse con el trabajo del equipo. No hemos tenido suerte en ese gol, con el rebote en el empate, pero hemos hecho un buen partido ante un buen rival, hemos luchado y hemos trabajado duro para intentar conseguir los tres puntos", añadió, en un análisis del 1-1 ante el Villarreal, en un encuentro en el que el Sevilla FC fue claramente de más a menos.