La Real Sociedad y el RCD Mallorca ya se han enfrentado cuatro veces esta temporada, tres de ellas en apenas 20 días, y esas caprichos de calendario siempre dejan piques, tensiones y resquemores varios entre los contendientes. En este sentido, en el vestuario bermellón se la tenían guardada al conjunto donostiarra, en concreto al centrocampista Mikel Merino, quien encendió a Son Moix en el duelo liguero de hace 10 días con un controvertido gesto para celebrar el tanto del triunfo vasco en Palma, logrado en el minuto 93 de un encuentro bronco y polémico con muchas decisiones arbitrales que caldearon los ánimos de ambos conjuntos. El '8' blanquiazul, al que le llovieron los insultos en redes sociales, se apresuró a disculparse y negó la provocación ofreciendo una explicación que no convenció a los baleares. Ahora, las siempre inflamables redes sociales vuelven a bramar, pero esta vez la indignación ha cambiado de bando tras las burlas que Pablo Maffeo, Jaume Costa y varios jugadores más del equipo isleño realizaron sobre el césped de Anoeta para celebrar el pase a la final de la Copa del Rey.
Sobre la bocina, Mikel Merino se elevó para cabecear un centro de Javi Galán que ponía el definitivo 1-2 en Son Moix el pasado 18 de febrero. El estadio de Palma estaba caliente porque su equipo jugó con uno menos toda la segunda mitad por una discutida expulsión de Antonio Raíllo a la que se sumarían tres rojas más al banquillo balear y otra para el visitante. En ese furioso contexto, el gesto del centrocampista navarro llevándose el dedo a la boca como si mandase callar al graderío hizo saltar chispas sobre el césped. Dani Rodríguez, Sergi Darder y el propio Merino fueron amonestados por encararse y las redes sociales alargaron la polémica varios días, hasta que más de 48 horas después, el jugador de la Real Sociedad emitió un breve comunicado para asegurar que no era un gesto de silencio, sino una 'L' que se acercó a la boca para besar en una dedicatoria a su pareja.
Su explicación no convenció en absoluto a la afición mallorquinista y tampoco al vestuario de Aguirre, desde donde filtraron a varios medios que estaban muy enfadados con ese gesto. Se la tenían guardada a Mikel Merino y en la pasada madrugada se tomaron una poco edificante venganza. Real Sociedad y RCD Mallorca volvieron a verse las caras este pasado martes, en el partido de vuelta de las semifinales de la Copa del Rey. El duelo llegaba igualado tras el 0-0 de la ida en Son Moix y Anoeta se había conjurado para hacer valer el factor campo. Sin embargo, fueron los visitantes los que tuvieron el privilegio de reír los últimos. Y, por lo tanto, de reír dos veces.
La Real tuvo un penalti para adelantarse en el añadido de la primera mitad, pero Greif paró el lanzamiento de Brais Méndez y luego repitió la gesta deteniendo también el chut de Mikel Oyarzabal, el primero de la tanda de penaltis en la que se decidió el primer finalista tras el 1-1 al final del tiempo reglamentario y de la prórroga tras los tantos de Giovani González y del propio capitán 'txuri-urdin'. El Mallorca transformó sus cinco lanzamientos -todos lanzados a la izquierda de Álex Remiro- y tras el último, anotado por Sergi Darder, se desató una fiesta que se le fue de las manos al cuadro bermellón.
No queda muy bien eso de quejarse de un gesto y luego hacer lo mismo. Y no sólo con un jugador, sino que corren vídeos y fotografías en las que se ve a numerosos futbolistas bermellones haciendo el mismo gesto de Mikel Merino. Samú Costa, Muriqi, Radonjic, Omar Mascarell, Llabrés, Van der Heyden, Rajkovic... son muchos los que dedicaron al navarro mofas, burlas y gritos que no se entienden bien... afortunadamente, pues la cosa ha escocido bastante en San Sebastián y las redes sociales se han llenado ahora de insultos a Pablo Maffeo y deseos de que el Mallorca pierda la final de Copa e incluso baje a Segunda división.
Todo se ha centrado en el lateral hispano-argentino porque se viralizó rápidamente un vídeo en directo que estaba grabando su compañero Jaume Costa; pero luego han circulado más imágenes que demuestran que no fue un hecho aislado, sino una práctica recurrente en la celebración de los baleares. "Es una L, la 'l' de la finaL", comentan con sorna los aficionados mallorquinistas, parafraseando a Maffeo, en los numerosos post que hay al respecto en X, Instagram, TikTok, Facebook...