De los tres porteros que tiene actualmente en plantilla el Real Madrid, sólo Thibaut Courtois tiene asegurada su continuidad de cara a la campaña 24/25. El belga sufrió en pretemporada una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda y será baja al menos hasta el mes de marzo, pero sigue siendo un pilar para los técnicos blancos.
En su ausencia, el club madridista apostó por la cesión de Kepa y el meta propiedad del Chelsea ha venido respondiendo hasta que también ha caído lesionado y le ha llegado la oportunidad a Lunin, en el ostracismo en las tres últimas temporadas y que ha aprovechado el momento para reivindicarse.
En el caso del vasco, no se descarta su continuidad, dependiendo de las pretensiones del conjunto inglés por un traspaso, mientras que el ucraniano está en el punto de mira de varios clubes, entre ellos el Betis, y podría aprovechar sus buenas actuaciones para buscar un nuevo destino que le asegura más protagonismo, aunque su contrato acaba en 2025 y no el próximo verano, como se pensaba.
En cualquier caso, el Real Madrid se encuentra peinando el mercado de porteros y no descarta fichar, pues puede verse solo con Courtois la próxima temporada. Así, según Relevo, los ojeadores blancos ya han elaborado informes de guardametas con diferentes perfiles.
De un lado, está la opción de contratar a un meta veterano como el brasileño Matheus, de 31 años, que lleva una década en el Sporting de Braga y dejó muy grata impresión en los dos encuentros disputados ante los blancos en la fase de grupos de la UEFA Champions League.
Pero al mismo tiempo también se vigilan cancerberos jóvenes y revalorizables, como es el caso de Randall Rodríguez, suplente en el Peñarol de Montevideo pero titular en la selección sub 20 de Uruguay, con la que disputó el Mundial de la categoría y llamó la atención de los técnicos del Real Madrid, que tenía como gran favorito a Slonina, si bien el estadounidense, de sólo 19 años, se decantó por un Chelsea que lo tiene cedido en el KAS Eupen de Bélgica.
Por otro lado, la tercera vía conduce a porteros más contrastados y al mismo tiempo preparados para plantar batalla a Courtois, como es el caso del valencianista Giorgi Mamardashvili, que ya sonó en verano como recambio del belga tras su lesión. Su edad (23 años) y su proyección le convierten en una opción más que interesante, pero no es del gusto de todos en el club blanco y algunos considera demasiado arriesgado invertir 25 millones de euros, que es la cantidad que pide Peter Lim para abrirle la puerta.