La situación del Deportivo de La Coruña resulta dramática. El conjunto gallego es decimoprimero en el Grupo I de Primera RFEF, a siete puntos de los puestos de ‘play off’. Pero el último empate ante el filial de Osasuna hizo que la afición estallase contra Imanol Idiakez, cuya continuidad como entrenador ha sido confirmada por el club pese a los rumores que apuntan a Paco Jémez como posible relevo.
En medio de este terremoto, un mito con Fran Gónzález ha dejado de ser el director de la cantera. Y otro ex jugador del cuadro blanquiazul como Aldo Duscher ha puesto el dedo en la llaga al indicar donde está el problema de todo, según su opinión.
“El Dépor se tiene que dejar ayudar. La gente que está ahí se tiene que dejar ayudar, no se puede cerrar tanto. Yo creo que hace ya cuatro años que está en una categoría que es una vergüenza para el deportivismo y encima teniendo dinero, que es lo peor. Entonces, tiene que ir por otro lado. Yo se lo he dicho un montón de veces en privado. Yo siempre a un club al que le soy fiel intento ayudarlo y aconsejarlo. Pero si no quieren dejarse ayudar, es su problema”, ha explicado el argentino en una entrevista en As.
“Se están equivocando mucho y es una pena, porque es un club que no se merece estar donde está. Por su gente, porque su gente es muy apasionada y muy buena gente. Es un club que tiene todo: una infraestructura muy buena y un estadio espectacular. Está todo perfecto, pero tiene que encontrar a la persona adecuada que vea las cosas diferentes. Cuando me preguntan sobre el Depor, siempre lo digo: déjense ayudar. No es lo mismo alguien que ha estado allí y conoce la casa a alguien que no la conoce. Por eso, siempre digo que tienen que apostar por exjugadores”, añadió en este sentido el ex centrocampista, que ofrece su ayuda como han hecho otros como Juan Carlos Valerón.
En ese sentido, Duscher insistió en que ha mantenido un contacto fluido con los dirigentes deportivistas en los últimos años, si bien recalcó que sus consejos nunca son escuchados. “Yo he hablado con gente actual y le he dicho: ‘el Depor es así y tenéis que ir por aquí, a buscar allí…’. No es tan difícil. Bueno, yo lo veo así. ¿Y qué hacen? Van por otro lado. Yo sé que ellos son los que manejan el club, perfecto. Pero yo quiero lo mejor para el club, porque a mí me da pena. Yo estuve entrenando en el Juvenil B hace dos años y veía cosas básicas. Tienes que dejar atrás el pasado. Creo que se lo he dejado muy claro, pero llevamos hablando tres años de lo mismo, que si el árbitro, que si esto, que si lo otro… No, para mí va por otro lado. Hay gente trabajando, hay que dejarla trabajar, hay que respetar al entrenador. Simplemente, intento ayudar desde el lugar que me toca”, insistió.
Por otro lado, el que fuese también futbolista de Racing de Santander, Sevilla y Espanyol desveló que se encuentra en estos instantes a la espera de ofertas para dar un salto en su andadura como entrenador. “Estoy empezando una nueva carrera. Espero tener éxito. Me toca prepararme de la mejor manera y encontrar, tal vez, un club que vaya por los mismos caminos que yo. No hay desesperación en agarrar cualquier cosa, quiero que mi carrera continúe y tenga duración. Quiero trabajar seriamente y cambiar un poco el fútbol, que está ya muy trillado”, destacó.
Su primera toma de contacto con los banquillos tras colgar las botas en 2013 llegó en el primer equipo en el que se formó de pequeño, el Belgrano de Esquel, en el Torneo Federal B de Argentina. Luego se preparó durante algunos años y pasó por el Juvenil B del Deportivo de la Coruña en la campaña 20/21, mientras sumaba la experiencia necesaria para tener la licencia de UEFA. Ahora quiere dar un paso más, tras sonar en su día para la selección argentina sub 20, pero de sus palabras se deduce que será difícil que lo haga en Riazor pese a ofrecer sus consejos.