El VAR llegó para impartir justicia pero ha instalado la locura y la tensión. Se hila tan fino, juzgando imágenes congeladas e ignorando la inevitable fricción del deporte de contacto y la alta intensidad, que a este ritmo se acabará viendo normal que los partidos se suspendan por no alcanzarse el número mínimo de jugadores. Como todo es interpretable y lo que prevalece es la interpretación, en todas las faltas se pide una roja. Es insoportable. Dicho esto, como pasó en el derbi, las imágenes (paradas) dejan poco espacio a la pataleta del Sevilla FC, pues la expulsión de Rakitic es calcada a la de Borja Iglesias del domingo y la entrada de Nianzou es tardía y desproporcionada.
En el minuto 36, el Sevilla FC ya perdía por 0-2 y jugaba con nueve futbolistas, en un nivel de sobre-excitación que si bien permitió acortar distancias en el 44', bien pudieron ser un arma de doble filo si Sorloth no hubiese perdonado una oportunidad clarísima en el primero de los ocho minutos añadidos en la primera parte. El gol de Rafa Mir al filo del descanso dio ánimos a un equipo que lo dio todo en la segunda parte, defendiéndose como podía -muy atrás con un 1-5-3 y muy juntos- y enviando al área de la Real cualquier balón que caía en sus botas.
Por rudimentario que parezca, estuvo a punto de funcionar gracias a las paradas de Bono y la ración extra de sudor que la grada supo reconocer y aplaudir. Al cabezazo de En-Nesyri en el 77' sólo le faltaron un par de centímetros para ser el 2-2; pero el balón no entró y el Sevilla FC se irá al parón liguero por el Mundial de Qatar 2022 sin conocer la victoria en casa en LaLiga después de siete partidos disputados en el Ramón Sánchez-Pizjuán y, con sólo 11 puntos, se pone en manos de Celta y Cádiz para no tener que verse un mes y medio en puestos de descenso.
El partido arrancó con Isco y Nianzou como principales novedades del once inicial de Sampaoli; con Navas también de regreso a la titularidad, con Gudelj como pivote con balón pero tercer central en defensa y con Rafa Mir en la derecha, y el malagueño de 'falso 9'. Sin embargo, la pizarra duró media hora, pues en el 28' se quedó con 10 por la expulsión de Rakitic y en el 34 se vio con 9 tras ver también la roja Nianzou; ambos a instancias del VAR.
El partido comenzó con un Sevilla FC intenso, queriendo recuperar pronto y presionando arriba, pero con ocasiones para la Real Sociedad más lucida con la pelota y haciendo daño con ella mediante el talento de Brais Méndez, Silva y Mikel Merino más la movilidad de Sorloth, a quien se sumó pronto Kubo tras la enésima lesión del canterano nervionense Carlos Fernández -pidió el cambio en el 10'-.
Sola y Gudelj no encontraron portería y Bono respondió con seguridad al disparo raso de Merino en un cuarto de hora de muchas disputas. El primer golpe lo dio Sorloth, que en el 20' aprovechó un gran pase al espacio de Mikel Merino para colarse entre Nianzou y Gudelj y poner el 0-1 elevándola de manera sutil para superar la salida del portero del Sevilla FC.
Tuvo el empate Isco, en una gran asociación interior de Lamela con un pase con maldad para Rafa Mir y control largo del murciano que se convirtió en pase para el malagueño. Solo ante Remiro, definió de primeras con el exterior de su bota derecha, pero el meta de la Real sacó una mano salvadora.
Del 1-1 jugando 11 contra 11, al 0-2 jugando ya con nueve. Brais Méndez desniveló la balanza en ocho minutos: le sacó la roja a Rakitic (28') en una acción idéntica a la de Borja y Jordán en el derbi; se llevó la entrada a destiempo de Nianzou (34'), en una acción en la que Navas fue amonestado por protestar la segunda expulsión; y definió con un toque sutil otra gran asistencia de Mikel Merino para hacer el 0-2 (36').
Un intento de control de Óliver Torres se convirtió en otra amarilla y el Sánchez-Pizjuán entraba en cólera al ver que su equipo llevaba más tarjetas (4) que faltas (3). Incluso había gente que abandonaba el estadio en una mezcla de impotencia, rabia y cabreo cuando Rafa Mir volvió a meter al Sevilla FC en el partido con un catedrático giro de cuello y un potente cabezazo con el que hizo el 1-2 en el 44'.
La Real pudo hacer el tercero por medio de Sorloth en el primero de los ocho minutos añadidos, pero su disparo a pase de Kubo previo 'robo de cartera a Navas' fue mansito a las manos de Bono y el marcador ya no se movió más. Tras el descanso, cuarto cambio de dibujo de Sampaoli que recompuso a su formación con la entrada de Kike Salas y Jordán por Rekik e Isco.
En la segunda parte, formó con con Gudelj y Kike Salas escoltados por Navas y Telles; Jordán como bisagra y Óliver justo por detrás de Lamela y Rafa Mir, los hombres más adelantados. Imanol también retocó su equipo con otro doble cambio y dio un pasito atrás, intentando amasar posesión sin exponer y defender con balón. Delaney, En-Nesyri y Januzaj fueron el resto de cambios, ya hombre por hombre.
La fuerza extra que dio el 1-2 fue efervescente y la receta en la segunda mitad era ser inteligente, aguantar muy juntitos y tratar de sacar máximo provecho faltas para colgarla al área por muy lejos que estuviese de la portería. Rozó el 2-2 en el 77', en otro gran centro de Telles que En-Nesyri esperó agachado para girar el cuello y ver cómo el balón se iba lamiendo el poste izquierdo de Remiro.
No obstante, pese a tocar muy atrás invitando al Sevilla FC a salir de la cueva, la Real Sociedad seguía siendo el que más rondaba el gol; generalmente con Kubo y Brais como ejecutores. El japonés, por dos veces, y el gallego lanzaron sendos avisos y Sorloth volvió a perdonar el tercero en el 61'.
Bono sacó un pie de acero ante Silva y el rechace le quedó muy alto al delantero nórdico, que no pudo rematar a portería vacía y sobre la misma línea. También resultó decisivo el portero del Sevilla FC al repeler un nuevo remate de Kubo desde dentro del área y, especialmente, en el 80', en un mano a mano con el joven Pablo Marín. El marcador ya no se movió, el equipo lo dio todo y el público incluso le despidió con aplausos pese a la derrota. Ahora, a resolver la primera ronda copera el domingo y un mes y medio de pretemporada en la que las miradas estarán puestas en Monchi. Prohibido fallar más.
1 - Sevilla FC: Bono; Jesús Navas, Nianzou (34'), Rekik (Kike Salas 46'), Telles; Rakitic (28'), Gudelj, Óliver Torres (Delaney 64'); Rafa Mir (En-Nesyri 64'), Lamela (Januzaj 89') e Isco (Jordán 46').
2 - Real Sociedad: Remiro; Álex Sola (Navarro 73'), Le Normand, Pacheco, Diego Rico; Brais Méndez, Mikel Merino (Guevara 46'), Zubimendi (Zubeldia 46'), David Silva (Marín 61'); Carlos Fernández (Take Kubo 10') y Sorloth.
Árbitro: Del Cerro Grande (C. Madrileño). Expulsó con roja directa a los locales Rakitic (m.28), por un pisotón a Brais Méndez, después de consultar el VAR y anular la amarilla mostrada en primer lugar; y Nianzou (m.34), de nuevo tras ver la acción en la pantalla a pie de campo, por una plancha sobre Brais. Además, amonestó a los sevillistas Navas (m.34) y Óliver Torres (m.40), y a los visitantes Merino (m.31) y Navarro (m.90).
Goles: 0-1 (20') Sorloth; 0-2 (36') Brais Méndez; 1-2 (44') Rafa Mir.
Incidencias: Partido de la decimocuarta jornada de LaLiga Santander disputado en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán ante 34.814 espectadores. Los jugadores del Sevilla saltaron al campo acompañados por niños y camisetas de apoyo a ANDEX, asociación de Andalucía y Extremadura de niños con cáncer, con el lema "Nunca te rindas".