Rafa Cala3 min lecturaMucho se está debatiendo en los últimos tiempos sobre si el fútbol actual, y, en concreto, LaLiga, la cual está siendo cuestionada constantemente por Gerard Piqué y la Kings League y por Florentino Pérez y Joan Laporta, presidente del Real Madrid y FC Barcelona, quienes en su empeño de apostar por la Superliga han argumentado que el fútbol español estaba perdiendo público. No obstante, los últimos resultados de audiencia no le han dado la razón a estas personas, puesto que los números del fútbol en le televisión pública demuestra que el deporte sigue teniendo bastante tirón a pesar de las condiciones en las que se emitió el choque.
El encuentro entre CA Osasuna y Sevilla FC, correspondiente a los cuartos de final de la Copa del Rey que finalizó con victoria del equipo navarro en la prórroga, por 2-1 fue seguido por una media de 1.337.000 televidentes, lo que se traduce en un 9'9% de share.
El encuentro se emitió por La 1 de TVE y contó con dos hándicaps fundamentales: la hora de inicio y el día. Las audiencias son muy buenas si se tiene en cuenta que ninguno de los dos equipos son Real Madrid y FC Barcelona, que el partido se disputó en un miércoles laborable y que comenzó a las 22:00 horas, produciendo que muchas personas no pudieran quedarse hasta tarde debido a sus obligaciones laborales y personales al día siguiente.
Por otro lado, hubo un problema aún mayor, y es que este encuentro en abierto coincidió, durante la primera parte, con la segunda mitad de la contienda que jugaron FC Barcelona y Real Sociedad, correspondiente a la misma ronda del torneo, lo que le restó audiencia durante buena parte del mismo. El choque entre la escuadra catalana y la vasca reunió a 1.117.000 de televidentes en M+ Liga de Campeones, televisión de pago, con un 7'6% de share.
Por ese motivo, los números de audiencia del encuentro CA Osasuna - Sevilla FC son muy buenos y respaldan la idea de que el fútbol español sigue interesado a pesar de que el argumento de Real Madrid y FC Barcelona para crear la Superliga y otras competiciones es que el fútbol español no interesa y que se está perdiendo a la gente joven. Unos argumentos que no se sostienen con estos datos cuando un partido se ve perjudicado, claramente, por la presencia de otro en el que jugaba un grande como el FC Barcelona.