Álvaro Palomo3 min lecturaDespués de una campaña pasada espectacular, en la que los rojillos terminaron séptimos y lograron el pasaporte europeo, Osasuna no está respondiendo a las expectativas en el presente curso, en el que marcha duodécimo con 19 puntos en su casillero lastrado por una pésima racha a la que puso fin el pasado viernes contra el Rayo. Y es los de Arrasate encadenaron seis jornadas sin ganar, con solo tres puntos de 18 posibles, lo que llegó a encender las alarmas en El Sadar.
El propio Luis Sabalza, presidente de Osasuna, reconoció en el almuerzo navideño que el club ha celebrado hoy que los resultados de este curso distan de ser tan buenos como los del curso pasado, pero que no todas las campañas pueden ser como la pasada. “Todos estamos de acuerdo en que 2023 ha sido un año histórico, seguramente uno de los mejores de la historia del club, uno de los años en los que hemos tenido más satisfacciones, no solo pensando en la final de Copa, sino en todas las victorias que vivimos el año pasado. La semifinal de Copa frente al Athletic en casa fue un subidón de osasunismo”, indicó Sabalza, que entiende que haya venido un bajón, pero que tampoco es una situación límite.
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"Tenemos que ser realistas. Yo creo que estamos bien. Tenemos 19 puntos y la posibilidad de acabar la primera vuelta con 25 puntos. A final de temporada podríamos tener 50 y eso lo hubiéramos firmado todos. No sé si es el objetivo, pero sí nuestro deseo”, indicó el presidente, que se pone tres metas para 2024: “Mantener al equipo, llegar a los 50 puntos y a partir de enero empezaremos con el aparcamiento de Tajonar; ya hemos empezado con el campo híbrido".
Dentro de estos planes también incluyó la renovación de Jagoba Arrasate, que termina contrato en junio de 2024 y con el que todavía no se ha profundizado en las conversaciones. Así, el dirigente afirmó que el club ha tomado la decisión de ampliar su vinculación, pero que la continuidad del míster no depende únicamente de esta voluntad por parte de la entidad, reconociendo que todavía no se han sentado en busca de un punto de encuentro.
“Es cuestión de sentarse a hablar. Todavía no lo hemos hacho. Yo quiero que siga, pero también depende de él… “, señaló con honestidad el dirigente rojillo, que mostró su deseo de renovar a Arrasate, pero que dejó entrever que no será sencillo.Además, cerró la puerta a fichajes en el mercado invernal a pesar del bache por el que ha atravesado el equipo: “Estamos contentos con lo que tenemos”.