CA Osasuna es uno de los equipos más reconocibles de la Primera división española. Con un trabajo de años por parte de Jagoba Arrasate, los navarros juegan casi de memoria y muchos de sus futbolistas están perfectamente adaptados y compenetrados entre ellos, algo que sin duda demostraron en una temporada 2022-23 en la que llegaron a la final de la Copa del Rey y fueron capaces de clasificarse para la fase previa de la UEFA Conference League. En tal recorrido, lo cierto es que todo fue como la seda. Se evitaron lesiones y dificultades que podrían haber dado al traste con mucho de lo logrado. Por ello, ahora sorprende que sin que el contexto haya cambiado demasiado, les haya surgido un inesperado problema en su propia casa.
Así es. Los datos no engañan. Si los rojillos han sido en otros momentos casi infranqueables en su terreno de juego, ahora se han visto inmersos en una situación tan nueva como dura, ya que les está costando muchísimo ser ofensivos en su propio terreno de juego. Para ser exactos, Osasuna es el segundo equipo de Primera División que menos remates a puerta ha hecho en un comienzo liguero marcado por su dificultad para ver gol, sobre todo en casa.
Para ser exactos, la plantilla que dirige Jagoba Arrasate es la segunda (35) que menos remates entre los tres palos ha realizado del campeonato. El Cádiz CF, con 33, tiene el peor registro, mientras que la UD Las Palmas es tercero por abajo, con 39. El Real Madrid es el líder de esta clasificación, con 79. Los de Tajonar suman esta cantidad en once jornadas, lo que da lugar a una media de 3,1 disparos a puerta por encuentro, cifra que les está haciendo muy difícil conseguir triunfos. Así, hasta la fecha lleva 12 goles a favor por 16 en contra.
Como señalábamos, es en El Sadar donde peor lo está pasando para marcar. El Athletic venció 0-2, mientras que el Barcelona hizo lo propio, pero recibiendo un tanto (1-2). Frente a Sevilla y Atlético de Madrid, los rojillos no lograron ver portería. Por su parte, el Granada recibió dos goles de Ante Budimir. Tres goles en cinco duelos delante de su afición.
Lo que ante su público se está convirtiendo en una auténtica hazaña, más allá de sus fronteras no es tal. En las seis jornadas jugadas a domicilio, Osasuna ha alcanzado la cifra de 9 goles. Su comodidad jugando en otros estadios le ha permitido mejorar su clasificación. En la última fecha, ante el Real Betis, no tiró a puerta en la primera mitad, mientras que en el segundo tiempo lo hizo en una ocasión. Rubén García hizo el 1-1 que a la postre de nada sirvió al ver a Isco poner el definitivo 2-1 en el tiempo de descuento.