Arrasate vuelve a estallar contra el arbitraje, señala a Simeone y lanza su propuesta a LaLiga

"Es más fácil expulsarme a mí que a Simeone (...) La manera de tratar a unos entrenadores y a otros no está siendo la misma", dice Arrasate en la previa del partido contra el Alavés de la jornada 8 de LaLiga EA Sports

Arrasate vuelve a estallar contra el arbitraje, señala a Simeone y lanza su propuesta a LaLiga
Jagoba Arrasate, entrenador de Osasuna. - X / @Osasuna
Sara Portillo MayaSara Portillo Maya 6 min lectura

El entrenador de Osasuna sigue enfadado dos días después de que fuera expulsado por protestar en el partido contra el Atlético de Madrid que se desarrolló en El Sadar y de eso ha hablado en la rueda de prensa previa al partido del domingo en Vitoria ante el Deportivo Alavés, correspondiente con la jornada 8 de LaLiga EA Sports.

En el partido del domingo 1 de octubre, que arranca a partir de las 16:15 horas de la tarde, Jagoba Arrasate no podrá estar. Así lo ha decidido el Comité de Competición de la RFEF, que sancionó con dos partidos al entrenador de Osasuna por la cartulina roja con la que fue amonestado en el anterior partido de la liga. No volverá hasta después del parón por selecciones de octubre (el fin de semana del 20) en El Sadar, cuando reciba la visita del Granada. Más motivos por los que mostrar su indignación.

Este mismo sábado 30 de septiembre ha expresado a los medios de comunicación Jagoba Arrasate que "la manera de tratar a los entrenadores no está siendo la misma", sino que es diferente en función del estatus. Así, ha querido analizar lo acontecido el pasado jueves en El Sadar: "Yo no me sentí tratado de la misma manera. En el segundo treinta el linier me amenaza, yo no veo que pase eso en otros banquillos y según en qué partidos", ha criticado.

Además, para ejemplificar ha señalado a Simeone, entrenador del Atlético de Madrid: "No sé por qué es, si hay niveles y niveles, si es un tema de estatus. No es la primera vez que me pasa. Es más fácil expulsarme a mí que a Simeone, que no estoy diciendo nada malo contra él, o el año pasado pasó con Ancelotti que entró hasta el medio del campo en el descanso. La manera de tratar a unos entrenadores y a otros no está siendo la misma".

Otro tema del que se ha hablado ha sido de la presión que los clubes ejercen sobre los árbitros. Sobre esto, Arrasate ha afirmado que "la sensación es de que Gil Marín dice algo y a los dos días pasa eso". No obstante, ha apuntado que no quiere pensar que sea "causa efecto". En todo caso, ha lamentado lo siguiente: "Si los clubes grandes lo hacen es porque hace efecto. Nosotros no tenemos esas herramientas".

Además, continúa opinando lo mismo sobre la jugada del gol anulado a sus pupilos: "Viendo la jugada, no hay por dónde cogerlo, pero cuando ves que ni siquiera se ha puesto el balón en juego... no hay por dónde cogerlo".

"No hay por dónde cogerlo, pero es que luego, cuando veo que todavía no se ha puesto el balón en juego, o sea que el Chimy todavía no ha sacado el córner y la supuesta acción es antes de eso... Que se arbitre así la jugada, no lo puedo entender ni por el árbitro ni por el VAR. Me parece un doble error", ha detallado.

"No podemos hacer ya mucho más por mucho que el CTA diga algo. Al final, la derrota, las expulsiones y la mala leche están ahí", ha detallado. Antes teníamos naturalizado el error del árbitro, como me puedo confundir yo o los jugadores, pero ahora sientes mayor injusticia porque hay herramientas para rearbitrarlo", ha asegurado.

Para zanjar el tema ha aclarado que "hay otras ligas que se pueden escuchar conversaciones, ese es el primer paso". "Escuchar naturalmente lo que dicen, pero no quieren, no sé por qué no quieren", ha agregado. Al final, pide una comunicación abierta: "En otras ligas se escuchan las conversaciones de los partidos y creo que es el primer paso. ¿Que puedan hablar? Creo que es mejor para ellos porque, al final, la sensación que tenemos muchas veces es que viene el árbitro, se va escoltado... Él es parte de esto y no debería ser así. Son deportistas también y los tenemos que tratar como tal. Pero a veces ellos mismos, o el estamento, les hace ser así: los protege, no se puede hablar con ellos, los meten en un coche y se los llevan... Eso creo que no les favorece. Y luego poder escuchar naturalmente lo que dicen, al igual que a nosotros nos ponen cámaras, sería el primer paso para, seguramente, naturalizar todo esto. Pero si no lo quieren, no sé por qué".