Alvaro Arenillas3 min lecturaCA Osasuna está viviendo un comienzo de campaña repleto de altibajos. Por un lado se está mostrando realmente fuerte como loca, pero por otro no termina de dar con la tecla a domicilio, donde cuenta todos sus partidos (dos) por derrotas. Ahora, preparando ya la visita de la UD Las Palmas del sábado 21 de septiembre (16:15), al menos cuentan ya con un alegrón tanto para Vicente Moreno en particular como para el club en general. ¿De qué hablamos? De la recuperación de Kike Barja.
Así es. La entidad de Pamplona cuenta desde este miércoles con el habilidoso jugador después de que el canterano rojillo haya superado la rotura de plastia del ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda sufrida en marzo de este año. La felicidad que siente tanto el jugador, quien saló al césped del campo 2 de Tajonar con una sonrisa, como el club, es casi incalculable.
Fue exactamente el 4 de marzo, ante el Deportivo Alavés, cuando el futbolista de Osasuna tuvo que retirarse del terreno de juego al inicio del encuentro por molestias en la rodilla izquierda. Las pruebas médicas determinaron el alcance de su problema en la articulación, la misma zona que también se rompió en 2019.
Lo cierto es que Barja ha sido un asiduo de la enfermería rojilla durante toda la carrera, algo que no le ha frenado a la hora de mostrar su ambición por darle la vuelta a la situación. La temporada pasada contó con escaso protagonismo, por lo que está será la definitiva para ver si su etapa en Osasuna tiene más recorrido.
Con su futuro asegurado hasta el 30 de junio de 2026, el jugador de 27 años no tendrá nada fácil hacerse con un hueco en los esquemas de Vicente Moreno, ya que debe pelear con la competencia que suponen Bryan Zaragoza, Rubén García, Iker Benito y José Arnaiz, jugadores con los jugadores con los que comparte posición, por lo que el reto es de una magnitud considerable.
Como suele ocurrir con estas lesiones de larga duración, su retorno a la competición lo irá dictando su forma física, siendo la Copa del Rey un posible escenario para probarse durante las primeras rondas antes de saltar al máximo nivel en su octava temporada con el primer equipo. Con su vuelta, Vicente Moreno cuenta con todas sus piezas disponibles, a excepción de Iker Muñoz, quien sigue recuperándose de una fractura del quinto metatarsiano del pie izquierdo que se produjo ante el Mallorca.