Fue el primer fichaje del Málaga Club de Fútbol en la temporada 2018/2019. Una llegada que le costó al club un total de 600.000 euros que se fueron rumbo al FUS de Rabat, su equipo de procedencia. Un fracaso absoluto que terminó con el jugador saliendo por la puerta de atrás y sin dejar nada reseñable en sus dos campañas y media en la Costa del Sol.
Se trata de Badr Boulahroud. El centrocampista africano es noticia por su pase de Marruecos a Arabia Saudí. El ex blanquiazul es nuevo jugador del Ohod Club, equipo de la ciudad de Medina y que milita en la Primera División del país. Confirma su fichaje después de no tener protagonismo en el Raja Casablanca.
Su falta de continuidad le había relegado a un segundo plano. De hecho, solo disputó ocho encuentros oficiales en liga la última temporada, prueba fehaciente de su bajo nivel. Incluso en el Málaga, en la temporada 2019/2020 había jugado más partidos de LaLiga SmartBank que en Marruecos.
Víctima del Expediente de Regulación de Empleo llevado a cabo por el Málaga para subsanar las cuentas y tras meses en el paro hasta encontrar acomodo en el Raja Casablanca, proseguirá su carrera en el país asiático a sus 29 años de edad, cerca de la sede principal del próximo Mundial de fútbol.
Cabe recordar que el marroquí llegó al club boquerón por recomendación expresa del ex jugador blanquiazul Nabil Baha. Bajo el paraguas de su internacionalidad absoluta y en categorías inferiores, el Málaga confió en el ojo de Baha, que falló estrepitosamente provocando uno de los peores fichajes de la última década del club.