Fernando Mateos3 min lecturaCada vez son más los futbolistas españoles que buscan fortuna lejos de nuestro país, alcanzando en algunos casos cotas de éxito de las que no gozaron en las competiciones nacionales. En concreto, en Polonia hay 20 jugadores en la máxima categoría, amén de otro buen número en segunda división.
Entre ellos viene destacando con fuerza Fran Álvarez, que a sus 26 años se ha convertido en la manija del Widzew Lodz en el centro del campo, consolidándose como uno de los mejores centrocampistas creativos no sólo de la pujante Ekstraklasa, sino en toda Europa del Este.
En España, el mediocentro alicantino se formó en las categorías inferiores del Villarreal desde los 15 años, aunque ya antes había sido reclutado para disputar un torneo de captación de jóvenes talentos al que tuvo que renunciar por motivos familiares, llegando a pasar un par de años jugando tan sólo al fútbol sala.
Tras alcanzar el filial del ‘submarino’, con el que llegó a disputar 33 partidos, Fran Álvarez vio que las puertas del primer equipo seguían cerradas y se marchó al Valladolid Promesas. Pero tampoco allí consiguió dar el salto y en 2021 puso rumbo al Albacete, emprendiendo esta nueva aventura el pasado verano.
“Era el momento para dar un paso adelante. Al principio de la temporada pasada tuve una lesión de sóleo y eso me hizo estar muy por detrás de mis compañeros. Tenía varias opciones, pero tenía bastante claro que quería venir aquí porque Jordi Sánchez, que también estaba conmigo en el Albacete, había venido al Widzed y me habló muy bien del club”, ha asegurado en el diario As.
La presencia del que fue compañero en el conjunto manchego y de Juan Ibiza ha facilitado su adaptación, aunque reconoce que lo pasado mal con el clima. Pero en apenas unos meses se ha convertido en un ídolo para su nueva afición.
Suma cuatro goles y dos asistencias en 20 partidos de Liga, siendo incluido dos veces en las cuatro últimas jornadas en el once ideal del campeonato. Por ello, el ex del Villarreal siente que ha encontrado su sitio.
“El futbolista español está acostumbrado a que todo su entorno le diga que ser futbolista profesional es llegar a Primera y ese esa no es la realidad. La realidad es que se puede ser futbolista en otros sitios. Yo, por ejemplo, estoy disfrutando muchísimo más del fútbol en Polonia. Todos los estadios están siempre llenos y estoy disfrutando. Me siento mucho más futbolista este año que el año pasado”, sentenció el nuevo héroe del Widzew.