James Rodríguez no se parece a Isco y desvela su futuro

La vida de James Rodríguez e Isco Alarcón ha tomado caminos paralelos. Ambos futbolistas tienen 31 años (aunque James cumple 32 en julio) y se encuentran sin equipo. Los dos pasaron por el Real Madrid, donde jugaron juntos, puesto que el colombiano llegó un año después que el andaluz. Tanto James como Isco vivieron grandes momentos en el conjunto blanco, pero sin llegar a las expectativas iniciales que generaron. Ahora sus caminos vuelven a ser iguales, aunque el colombiano ha decidido mostrar sus ideas para el futuro e Isco sigue en un hermetismo total.

James se encuentra sin equipo desde que el pasado mes de abril rescindiese su contrato con el Olympiakos griego. A sus 31 años, el centrocampista colombiano todavía es optimista de cara a su futuro en el fútbol, queriendo jugar en Europa la temporada que viene y no pensando en colgar las botas.

"Yo creo que va a salir algo bueno. En Europa la temporada está acabando y los equipos no han planificado la siguiente temporada. Entonces creo que en junio y julio se empezará a mover quién quiere al '10'", comentó James durante una entrevista con Noticias RCN.

"Europa, en donde pueda jugar cada tres días. Me siento superbien físicamente, sé que puedo dar más, porque tengo talento y calidad. Soy una persona que me encanta trabajar. En mi trabajo soy muy curioso, superprofesional, así muchos duden, pero a mí no me importa lo que se hable de afuera. Sé lo que yo soy y sé lo que puedo dar", siguió diciendo el jugador 'cafetero'.

Con respecto a su paso por Olympiakos FC, James indicó que allí jugó "bien", aunque "los números son un poco bajos" para todo lo que jugó. "Yo no me arrepiento de lo que hecho y más cuando no te tratan bien, no te tratan de una manera seria o no valoran lo que has hecho", añadió James Rodríguez.

Por último, James Rodríguez también habló sobre la exposición mediática que sufre, sobre todo en su país, donde su convocatoria (o no) por parte de la selección colombiana es algo que tiene divididos a los aficionados 'cafeteros'. "Es lo más normal que hay. Que hablen bien o mal, pero que hablen. Yo siento que divido mucho, porque hay muchas personas que me quieren, pero otros que me tiran mucho 'hate' (odio) eso está claro. No sé por qué me odian tanto", concluyó.