Dicen algunos mantras de esos de los sobres de azúcar que acompañan al café que 'Unas veces se gana y otras se aprende' o que 'Lo que no te mata te hace más fuerte'. Azucarillos como estos colecciona Bryan Zaragoza en un amargo inicio de su aventura en el Bayern de Múnich. Nadie dijo que abrirse paso en un gigante europeo fuera sencillo y en eso anda el extremo malagueño. Sorprendentemente, el motivo de su inesperado ostracismo no es deportivo, sino que reside exclusivamente en un capricho lingüístico de Thomas Tuchel, que sigue en el banquillo del Allianz Arena de manera meramente testimonial, pues incluso se ha anunciado su salida. El relevo técnico ya supone una luz en el camino del ex del Granada CF, que aguanta estos días complicados confiando en sus posibilidades y con la tranquilidad extra que recientemente le ha transmitido la entidad.
Firmó para incorporarse en verano, pero la plaga de bajas que Tuchel sufría en los extremos hizo que el Bayern negociase en el pasado mercado invernal un adelanto en su llegada a Múnich, como cedido por el Granada hasta que en junio pase a ser jugador del cuadro bávaro a todo los efectos. Sin embargo, pese a llegar a una plantilla en muy mal momento y mermada por problemas físicos, el español sólo ha jugado 35 minutos en dos de los nueve encuentros oficiales que su equipo ha disputado entre Bundesliga y Champions en los casi dos meses que lleva en Alemania. Su situación no es única pero resulta tan extraña que medios de comunicación de media Europa sigue con atención este caso: de irrumpir en LaLiga, debutar con la selección española absoluta (para 'mosqueo' del entorno de Brahim) y ser fichado por un grande, a no jugar nada.
En los últimos días, incluso se ha rumoreado con fuerza un posible regreso anticipado a España y el diario Sport informó de que el FC Barcelona está interesado en hacerse con sus servicios aprovechando que el gran valedor de su fichaje por 13 millones de euros más otros 5 por su cesión, Christoph Freund, sólo había durado unos meses como director deportivo del Bayern. No obstante, según ha podido saber ESTADIO Deportivo, el club germano le ha transmitido paciencia y confianza a Bryan Zaragoza, asegurándole que su ostracismo es una situación coyuntural y que su contratación es un movimiento de futuro ante el que siguen plenamente convencidos.
Así se lo ha transmitido personalmente Max Eberl, nuevo director deportivo del club bávaro. La decisión final estará en manos de la persona que llegue para hacerse cargo del puesto de entrenador, pero gran parte de esas opciones siguen estando en las botas y en la cabeza de Bryan Zaragoza. Mentalmente, el malagueño sigue fuerte, sin pensar en hacer la maleta para regresar a España y sin perder el tiempo en otra cosa distinta a redoblar trabajos para seguir derribando las barreras de su adaptación. "Es el movimiento más importante de mi vida", dijo en una presentación que generó gran repercusión mediática. No va a bajar los brazos tan fácilmente.
En este sentido, aprovecha los divertidos 'entrenamientos invisibles' para estrechar lazos en el vestuario con el resto de sus compañeros y, al mismo tiempo, lo da todo sobre los campos de entrenamiento con golazos como el que se puede ver en el post insertado bajo estas líneas: por toda la escuadra, en la sesión inmediatamente previa al último partido liguero ante el Darmstadt 98, en el que ni siquiera fue convocado por Tuchel.
#[media;[proveedor:4;id:Official_Benji_/status/1767895536525316506]]
Sólo ha jugado 20 minutos ante el VfL Bochum el pasado 18 de febrero y 15' ante el Mainz 05, el pasado día 9; pero no se va a rendir. Ya en sus jóvenes inicios recibió 'calabazas' en Málaga, Sevilla e incluso en el propio Granada, antes de triunfar de rojiblanco. No es la primera vez que ve cerrarse una puerta y sabe está preparado para insistir hasta lograr abrirla.