Adela Requena4 min lecturaSergi Darder lloró este domingo en Vallecas. El jugador del Espanyol sufre en primera persona lo que es estar en la zona roja de la clasificación. Su equipo demostró que quiere seguir siendo de Primera y el triunfo ante el Rayo Vallecano (1-2) les ha dado vida para seguir soñando y luchando a falta de tres jornadas para que termine la competición liguera.
El jugador del Espanyol anotó el primero para el conjunto blanquiazul desde los once metros. De penalti. Y al volver al banquillo, las cámaras le pillaron muy emocionado, llorando, liberando la tensión acumulada en un partido importante. Siendo el vivo reflejo de lo que jugadores, técnicos, directivos y afición siente en estos días. La seña de lo que es estar cerca del descenso pero también cerca de la permanencia.
Lo cierto es que el perico no lo está pasando bien esta temporada. Una temporada difícil para un Espanyol que parecía tener las esperanzas perdidas pero que hoy demostró que el espanyolismo vuelve a creer gracias al triunfo ante el Rayo. Se niegan a aceptar la derrota y por ello aprietan el puño y son eficaces. Se niegan también a aceptar la lógica, algo que les ha tocado hacer a lo largo de su historia más veces de la que querría.
Los elogios al jugador del Espanyol han llegado pronto a las redes sociales. En Twitter, escaparate social para hablar de todo lo que es tendencia y última hora, algunos usuarios aseguran que se han sentido identificados con las lágrimas de Darder. Su gol, incluso, ha recordado al de un mítico ex jugador brasileño. "En el segundo gol, la jugada de Darder me ha recordado al gol de Ronaldo Nazario en Compostela. Tenía el gol en la cabeza y no lo han podido derribar ni haciendo falta. Ha sido un gol con el corazón y el alma y en el momento clave. De auténtico crack", escribe @meca_josea.
Hay quienes aseguran que "sin él, este equipo ya estaría en Segunda División". Y hay quienes relatan que "la lucha por la permanencia es la hostia" y que su imagen llorando en el banquillo recuerdan a "aquellas imágenes de Aspas absolutamente roto en una de sus muchas epopeyas con el Celta".
El Espanyol finalizará esta 35ª jornada con 34 puntos, a 1 de Valladolid y Getafe, que prometen ser sus rivales en una Liga a tres bandas en el que el campeón se llevará como premio la permanencia. Porque Celta, Almería, Cádiz y Valencia todavía no tienen los puntos necesarios como para que la salvación sea matemática, pero los conseguirán.
La calculadora de la salvación dice que el Espanyol se quedará en Primera si logra ganar dos de los tres partidos que tiene pendientes antes de que finalice el campeonato. Atlético de Madrid, Valencia y Almería son sus futuros rivales.