El Tottenham Hotspur vivió otra decepción, otra de esas noches agrias a las que está tan acostumbrada la afición de los Spurs. La hinchada inglesa esperaba mucho de los suyos en busca del pase a cuartos de la Champions League, pero terminó encontrándose con un gris encuentro de 0-0 que, sumado al triunfo del Milan en la ida por 1-0 (Brahim Díaz) permite a los italianos volver a codearse con los grandes de Europa más de una década después.Esta eliminación, triste y temprana, puede poner el punto y final a la etapa de Antonio Conte en el norte de Londres. Un romance que nunca ha acabado de cuajar, ya que el italiano no ha podido desplegar su sello en el equipo.
Con un plan desprovisto de armas claras, las carencias de un estático Tottenham saltaron a la luz mientras esperaba que a Harry Kane se le encendiera una bombilla o a que Heung-min Son, seguramente en su peor temporada en Londres, tuviera una chispa de gracia.
Ese era el deseo de los jugadores, mientras que los aficionados entendían que al menos habría un arrebato de orgullo, un asedio constante, una caída de los italianos por pura insistencia. Si los milaneses iban a estar agazapados todo el encuentro, marcar uno y forzar la prórroga sería el mínimo exigible para los londinenses.
Tremenda sorpresa se llevaron cuando las mejores ocasiones del partido fueron para los italianos, siempre cómodos en ese papel de mártires. Un error de Messias, en posición inmejorable, y una buena parada de Forster a una tijera del incombustible Giroud, estuvieron cerca de terminar la fantasía del Tottenham mucho antes.
Obvio que la eliminación no llegó hasta escuchar el pitido final, pero ya se respiraba antes; y eso que en el descuento, y ya con un jugador menos por la expulsión de Cristian Romero, a punto estuvo de llegar el milagro con un cabezazo de Harry Kane que Maignan repelió por puro instinto y reflejo.
Once años después, el Milan vuelve a los cuartos de final de la Champions, vuelve a sentirse un grande y vuelve a optar a un título que se le resiste desde 2007.
- Ficha técnica:
0 - Tottenham Hotspur: Forster; Emerson (Richarlison, m.70), Romero, Lenglet, Davies, Perisic (Porro, m.53); Skipp, Hojbjerg; Kulusevski (Sánchez, m.83), Son y Kane.
0 - Milan: Maignan; Thiaw, Tomori, Kalulu, Hernández; Messias (Saelemaekers, m.56), Krunic, Tonali; Díaz (Bennacer, m.81), Leao (Rebic, m.89) y Giroud (Origi, m.81).
Árbitro: Clement Turpin (FRA) amonestó a Romero (m.17), Lenglet (m.21) y Skipp (m.95) por parte del Tottenham y a Thiaw (m.93) por parte del Milan. Expulsó a Romero por doble amarilla en el minuto 77.
Incidencias: Partido correspondiente a la vuelta de octavos de final de la Liga de Campeones disputado en el Tottenham Hotspur Stadium (Londres).