Alvaro Arenillas3 min lecturaLa victoria de la Real Sociedad ante el Benfica por 3-1 en la UEFA Champions League fue tan cómodo como brillante. Sin embargo, ello no evitó que los aficionados donostiarras pasasen un mal rato en la segunda parte; y es que apenas habían transcurrido cinco minutos del segundo tiempo, los hinchas del Benfica empezaron a lanzar bengalas al campo.
Así es. Pese a su prohibición y a que es más que probable que la entidad portuguesa se lleve una importante multa, sus seguidores no tuvieron reparos en arrojar hasta cinco bengalas, llegando a caer algunas de ellas sobre los aficionados locales. Fueron momentos de tensión. Por momentos parecía que el árbitro suspendería el partido, pero todo se 'arregló' con un mensaje a través de la megafonía; y tiramos de comillas porque tras el mismo hubo más lanzamientos.
Cerrado el choque sin que hubiese que lamentar ningún herido, el capitán de la Real, Mikel Oyarzabal, quiso mandar un mensaje de cariño a esos seguidores que durante la segunda parte no pudieron estar tranquilos, ya que tenían puesto un ojo en el césped y otro en lo que les podía caer por detrás.
"Mandar todo el ánimo a la gente que ha recibido las bengalas, desearles que estén todos bien. El árbitro hace lo que puede, ha mandado el mensaje pero no puede hacer mucho más", señala en los micrófonos de Movistar.
Lo que no puede sino provocar una sonrisa en el rostro de Mikel es el juego desplegado por el equipo. Durante todo el primer tiempo tuvieron al rival a su merced y acabaron metiendo tres goles que pudieron ser cuatro o cinco. Así explica lo ocurrido sobre el césped el Reale Arena. "Nos fuimos con 3-0 y muy buenas sensaciones, pero si te puedes ir con 4 o 5 hubiese sido mejor. El gol de ellos nos pudo generar dudas, pero creo que supimos controlarlo", analiza.
Por último, se mostró más que feliz por ver cómo la afición está pudiendo disfrutar de una fantástica Champions League, y es que hoy, ante todo un campeón de Europa, el Reale Arena ha sido una fiesta. "La gente está disfrutando con nosotros. Estamos dándolo todo y la afición nos están apoyando mucho. No queríamos jugar la Champions, queríamos competirla", señala.
Sobre lo que resta de Copa de Europa, en la Real están esperando a ver si el Inter de Milán gana su partido. Si lo hace, serán matemáticamente equipo de octavos de final.