Jesús Mejías
Sergio González logró el año pasado una hazaña en la que pocos confiaban, la permanencia del Cádiz Club de Fútbol en Primera división. Sin embargo, el fútbol tiene poca memoria, y el entrenador catalán podría estar viviendo sus últimas semanas como técnico del cuadro gaditano. El equipo amarillo solo ha ganado un partido de liga hasta el momento, y las cifras dejan mucho que desear. El calendario no es el más favorable, los andaluces se medirán a dos de los tres equipos punteros de la categoría: Atlético de Madrid y Real Madrid, y entre ambos encuentros, un rival directo por la permanencia, el Getafe.
El catalán se la juega, sería muy complicado que Sergio González se sentara en el banquillo del estadio Nuevo Mirandilla ante la UD Almería en la primera jornada tras el parón por el Mundial de Qatar si como mínimo no logra sacar un triunfo en estas tres jornadas y la imagen no mejora tras la durísima derrota ante el Rayo Vallecano. Por lo tanto, se puede decir que el futuro del técnico depende de los resultados de las próximas tres jornadas, y de lo que acontezca también en la eliminatoria de Copa del Rey ante el Real Unión de Irún.
La afición quiere resultados, está viendo como por segunda temporada consecutiva su equipo está teniendo muchos problemas en el inicio de curso futbolístico y no quieren vivir un final de temporada tan agónico como la pasada campaña en la que un tanto del Choco Lozano en Vitoria, y un fallo de Jorge Molina con el Granada dejaba a los gaditanos en Primera división.
Otro debate sería si Sergio González es el principal culpable de la situación deportiva que atraviesa el Cádiz, aunque la realidad es que hay división dentro de la afición, muchos piensan que hay otros responsables, mientras que un sector de la hinchada cree que el técnico ha cometido errores deportivos en estas once jornadas.
Tres partidos que marcarán el futuro de Sergio González, en el club no van a despedir al catalán antes del Mundial, son conscientes de que podría ser contraproducente ya que el nuevo técnico apenas tendría tiempo para trabajar con la plantilla antes de afrontar un debut, mientras que si la destitución se produce tras el partido ante el Real Madrid o la eliminatoria de Copa del Rey, el entrenador que sustituyera a Sergio tendría prácticamente un mes para hacer una nueva pretemporada con el Cádiz CF.