La dirección deportiva del Betis, en su afán de nutrirse de las principales perlas que ofrece el mercado español a un precio accesible, ha estrechado el cerco, como ya informó ESTADIO días atrás, sobre la gran joya del Valladolid Iván San José, más conocido en el mundo futbolístico como Chuki.
En Heliópolis siguen de cerca al mediapunta de 20 años desde hace un tiempo considerable merced a sus buenas prestaciones en el filial pucelano y hace semanas, tal y como pudo confirmar ED, iniciaron conversaciones que han avanzado considerablemente. De hecho, según la información recabada por este diario, su fichaje ha llegado a estar encarrilado, por el deseo del futbolista de vestir de verdiblanco y el hecho de entrar en su último año de contrato.
El Valladolid, a pesar de que está realizando la pretemporada con el primer equipo con un gol y una asistencia en su haber, no había definido todavía su rol en el próximo proyecto, lo que el Betis aprovechó para convencerle y dar muchos pasos al frente. Sin embargo, ahora que se incorporación se hallaba enfilada, el presidente del Valladolid, el brasileño Ronaldo Nazario, se ha entrometido en esta operación y ha valorado el futuro de la perla de 20 años.
Así, en esta misma semana se ha producido una reunión entre el dueño de la entidad y los responsables técnicos y deportivos, en la que el nombre de Chuki ha estado sobre la mesa. Ronaldo ha transmitido que es un futbolista que le gusta mientras que el cuerpo técnico le ha comunicado que podría llegar a encajar en los planes de la primera plantilla por su polivalencia y sus excelentes prestaciones en la puesta a punto vallisoletana.
Esta intromisión de Ronaldo, con el respaldo inicial de Paulo Pezzolano, retrasa un fichaje en que el Betis ha trabajado a la sombra y tenía cerca de cerrar, si bien, como ha podido averiguar ESTADIO, ahora mismo todos los escenarios están abiertos y todavía podría recalar en el Benito Villamarín.
La intención del Betis, que confía mucho en la progresión del mediapunta vallisoletano y lo ve como una oportunidad de mercado, sería ficharle para, acto seguido, cederle a un proyecto ambicioso de Segunda división para que continúe su crecimiento de cara a un futuro como verdiblanco.
Lo cierto es que esta operación atraviesa ahora mismo por un momento determinante en el que ambos clubes están jugando sus cartas para decidir el destino final de Chuki, al que, obviamente, le seduce dar el salto a La Palmera.