Leyenda viva con mayúsculas del Real Betis, Joaquín Sánchez ha sido reconocido en su localidad natal, El Puerto de Santa María, como hijo predilecto en un emotivo acto celebrado en la tarde de este martes. Rodeado de familiares, amigos y convecinos, el capitán verdiblanco, a sus 41 años, sigue en plena forma, razón por la que acapara elogios (también en su faceta de presentador de televisión con 'El Novato', en Atresmedia), bate récords y asombra a propios y extraños. El otrora extremo y ahora más mediapunta bordea la jubilación, aunque se resiste a abandonar un mundo del deporte donde se mueve como pez en el agua y en el que, con un físico portentoso y un sacrificio continuo, ha demostrado tener sitio todavía.
El '17' se lesionó en tierras búlgaras el pasado 27 de octubre, con una rotura en el sóleo que le ha tenido mes y medio K.O. Sacrificó sus vacaciones pre navideñas y redobló esfuerzos en la Ciudad Deportiva Luis del Sol, junto a los también renqueantes Juanmi, Camarasa, Luiz Felipe y Juan Cruz, para volver a trabajar con el resto de sus compañeros a tiempo de disputar alguno de los tres amistosos y, sobre todo, con el firme objetivo de estar en la convocatoria el próximo 29 de diciembre contra el Athletic Club en el retorno de LaLiga. No pudo ser ante el Manchester United, pero Joaquín tuvo minutos frente al Inter de Milán, firmando la asistencia al de Coín en el 1-0. Ahora, espera contar para Pellegrini el viernes ante el Atalanta. Y, mientras tanto, 'coquetea' con una renovación que ya no extrañaría a nadie.
"¿Un año más si entramos en Champions? Eso no es que esté pedido pedido... Eso está firmado", aseguraba el portuense entre bromas a los medios de comunicación reunidos a las puertas del Teatro Municipal Pedro Muñoz Seca antes del acto, aclarando que "uno siempre sueña eso", además de centrar el objetivo del Betis en la 22/23: "Queremos volver a estar en Europa. Queda mucho por delante y, si se pone a tiro la cuarta plaza, hay que luchar hasta el final por ello". Sería un premio para todos, incluida la afición, que vio cómo su eterno capitán remataba las celebraciones por el título de la Copa del Rey con el anuncio de que no se retiraría, sino que jugaría un año más.
"Llevo tiempo entrenándome. El otro día jugué un ratito contra el Inter, pero estoy deseando que empiece ya LaLiga. Estamos compitiendo con la idea de coger el ritmo lo antes posible. Queremos seguir con esa línea que hemos tenido antes del parón", añadía Joaquín, que agradeció al alcalde de El Puerto, Germán Beardo, el reconocimiento como hijo predilecto: "Puede ser el título más bonito, porque es mi tierra, es mi gente, donde me he criado. Estoy enormemente agradecido. El Puerto no me debe nada; yo lo llevo por bandera. Son mis raíces, y me siento orgulloso de ser portuense. Es verdad que salí con 14 añitos, pero me lo he llevado en vena. Estoy feliz".