Ernesto Valverde deja huella allá por donde pasa y se descubre como un referente de los banquillos de nuestro país. Desde su paso por el Athletic Club hasta destinos como Espanyol, Valencia y Barcelona, sus ideas han dejado huella. Incluso en el tropiezo con Villarreal, donde, pese a un despido en enero, su presencia aún se valora. La cercanía con sus jugadores, un valor clave para forjar sus vestuarios.
Actualmente, Valverde dirige al Athletic, que experimenta su mejor arranque en 40 años, evocando los tiempos de Javier Clemente. Los compañeros de Relevo han querido rememorar la figura del 'Txingurri', con varios testimonios de antiguos exfutbolistas que lo tuvieron como entrenador. Todos ellos guardan un gran recuerdo. Aunque ahora el equipo bilbaíno destaque por su estilo atractivo, no siempre fue así. Aunque siempre se ha destacado como un entrenador exitoso, siempre ha contado con algún que otro altibajo.
Lejos de los estereotipos del fútbol, quienes conocen a Valverde hablan de él como una persona común. Su pasión no se limita al fútbol, abarcando intereses diversos como el arte, la fotografía, el ajedrez y la música. Una persona común, que ha dejado muy buen recuerdo allá donde ha estado.
Su incursión en elecciones presidenciales del Athletic sorprendió a muchos, ya que apostaban por otros perfiles. Recordemos que esta es la tercera etapa del técnico extremeño en San Mamés. Regresó al club tras su paso por Barcelona, demostrando la estima que le tienen en Bilbao. Su trayectoria como entrenador empezó en Lezama, ascendiendo desde cadetes hasta el primer equipo en 2002.
Pablo Orbaiz, exjugador del Athletic y un conocedor de tener a Ernesto como entrenador, resalta la normalidad y el sentido común de Valverde. La gestión en Villarreal, a pesar del desconcierto, dejó una impronta positiva entre los jugadores. Ha sido el único borrón en su expediente. El salto a Valencia en 2012 fue determinante, liderando al equipo hacia una remontada en la tabla.
La etapa en el FC Barcelona, aunque complicada, le permitió aprender y adaptarse a un entorno diferente. La convivencia con estrellas como Messi requirió una habilidad especial para equilibrar egos. El parón tras Barcelona le llevó a reflexionar sobre nuevos horizontes, considerando experiencias en Japón o Australia.
Sin embargo, su retorno al Athletic fue aclamado, mostrando una nueva faceta estratégica y táctica. La actual racha positiva refleja la confianza y el compromiso del equipo con el propio técnico. En Bilbao, confían en que Valverde continúe liderando el proyecto. Su legado va más allá de títulos; es la marca de un entrenador completo y apasionado que ha dejado huella en cada paso de su carrera.