El
Alcalá no sólo logró tres puntos ante el Espeleño, sino que quizás dio el paso necesario para lograr la permanencia. En un gran segundo tiempo, superó a los cordobeses, el equipo revelación de la categoría, sumando tres puntos redentores.
"Sobre todo en el segundo tiempo, se vio el mejor
Alcalá desde que llevo aquí. Ahora es cuando vamos viendo lo que entrenamos. Después del primer tiempo, lo que hemos hecho es corregir algunas cosas; no muchas, pero, cuando un equipo está en descenso, quema el balón. Hay que tener tranquilidad. Cuando estemos trabajando, hay que tener también la mente fría. En el segundo tiempo, aparte de esa lucha, tuvimos la frialdad necesaria en momentos oportunos", manifestó
Selu, entrenador alcalareño, orgulloso de sus jugadores, pero consciente de que el objetivo no se ha conseguido todavía, y, por ello, lanzó un mensaje: "Lo que quiero es que el campo se llene. Quedan nueve finales y hay que ganar, al menos, cuatro, y dejar al
Club Deportivo Alcalá en
Tercera".
Pese a la derrota (4-0), Selu señala que aprendieron la lección en el
Antonio Barbadillo: "Empezamos a ganar el partido en el segundo tiempo de
Arcos. Éste es el primer partido en que me siento correspondido, tanto en ataque como en defensa".