El
juzgado de lo Penal número 11 de Sevilla ha absuelto a
Rubén Castro del delito de quebrantamiento de medida cautelar con respecto a su expareja, al considerar que no existe una prueba de cargo suficiente para desvirtuar el principio de presunción de inocencia del futbolista "y alcanzar con plena convicción una conducta activa y dolosa del acusado tendente a incumplir la medida que pesaba sobre el mismo".
Rubén Castro se sentó en el banquillo acusado de haber violado la orden de alejamiento que le impedía acercarse a su expareja desde 2013,
después de que ésta le denunciara por malos tratos.
Una causa que supuso la primera victoria del jugador contra la que fuera su novia porque también salió absuelto de ese primer procedimiento cuyo juicio se celebró en 2017.En una
sentencia difundida por la oficina de comunicación del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía y contra la que cabe interponer recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Sevilla, el magistrado concluye que "absolutamente todos y cada uno de los testimonios resultan parciales, escasamente objetivos e impregnados de una evidente carga subjetiva que conducen al tribunal a desconfiar notablemente de su contenido".
La acusación particular y la defensa presentaron cada uno un testigo, que ofrecieron versiones totalmente opuestas de lo que pudo suceder
en una discoteca de Vejer en verano de 2013. La acusación sostuvo que Rubén Castro se acercó a la joven y la llevó a un reservado para hablar con ella; mientras que la defensa niega ni siquiera que hubieran tenido contacto.