Sergio Ramos, capitán del
Real Madrid, aseguró que en su equipo no hablan de actuaciones arbitrales, pese a sentirse perjudicados ante
Las Palmas, ni ponen tuits, en referencia al que escribió
Gerard Piqué denunciando ayudas de los colegiados a su eterno rival.
"De los árbitros no vamos a hablar ni ponemos tuits. Seguimos en nuestra línea", aseguró
Ramos en zona mixta extendiendo la línea marcado por su entrenador,
Zinedine Zidane, que optó por la autocrítica antes que por mirar la actuación arbitral.
El capitán justificó las palabras de
Marcelo, que dijo que en el campo no hacen lo que hablan antes del partido. "Cuando el resultado es negativo siempre es más fácil hablar. Hay que mantener la calma.
Marcelo se refiere a que nos precipitamos para tomar decisiones y no salen las cosas como queremos".
"Estamos entrenando en una línea positiva para seguir mejorando lo que estamos haciendo mal en las primeras partes. La jugada puntual de
Bale nos hizo quedarnos con uno menos, el desgaste ha sido el doble y hemos sumado un punto en un mal partido", añadió.
El
capitán madridista lamentó las ocasiones perdonadas "que otros días son goles" y señaló la "distancia entre la línea ofensiva y la defensiva", como una de las claves por donde se rompió el
Real Madrid. "Ellos han sabido aprovechar los espacios que hemos dejado y en la segunda parte era difícil con uno menos".
"Cuando las cosas no salen te preocupa y haces por mejorarlas. Estamos en esa dinámica para mejorar en un momento de la temporada que el margen de error es menor. No estamos líderes aunque tenemos un partido menos. Nos habría gustado mantener distancia con el Barcelona pero hay que seguir avanzando para que el equipo pueda mejorar", agregó.
Por último, no entró a valorar el anuncio de
Luis Enrique Martínez de abandonar el banquillo del Barcelona a final de temporada. "Nos es totalmente indiferente, tenemos demasiado en casa como para barrer el jardín del vecino".
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