El fútbol australiano vivió el pasado fin de semana una de las situaciones más surrealistas de los últimos tiempos. Todo marchaba sin incidentes hasta el comienzo de la segunda parte, cuando en su regreso al campo
Vedran Janjetovic, el portero del
Western Sydney Wanderers, se encontró la red de la portería llena de serpientes de juguete.
El acto se debió al enfado de los seguidores del
Sydney FC, equipo al que pertenecía Janjetovic antes de fichar por el eterno rival, el Western Sydney Wanderers. El guardameta, cansado de la falta de oportunidades decidió probar suerte en el equipo adversario, hecho que sus antiguos aficionados, los fanáticos 'Celestes', aún no le han perdonado.
Dadas las circunstancias, el cancerbero optó por tomárselo con humor y mantener la portería del Wanderers a cero en la jornada número 15 de la
A-League (Liga Australiana).
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