La contratación de
Sabaly ha permitido al
Betis respirar y cubrir la marcha de un fijo como
Emerson, aunque no supone que los verdiblancos se hayan olvidado de
Héctor Bellerín, que ha pasado de prioridad a
broche soñado de la planificación
21/22. El bajísimo rendimiento de
Montoya hace recelar a los técnicos, mientras que
Álex Moreno está en el mercado, por lo que la polivalencia del internacional senegalés le convierte en alternativa para ambos perfiles. Queda, lógicamente, que se alineen los astros, pues la apuesta verdiblanca pasa por que se aproxime el '
deadline' de la ventana estival con el badalonés todavía en Londres para hacer una última
jugada.
Resultará harto
difícil que este
escenario se produzca, aunque giros más raros se han visto. El ex canterano culé haría muy feliz a su
padre portando el escudo de las trece barras en el pecho, si bien su sueldo (
seis millones de euros netos por temporada), las exigencias del
Arsenal (es uno de sus capitanes y tiene contrato hasta 2023) y la altísima competencia (
Atlético, Villarreal, dicen que incluso el
Sevilla FC, más varios italianos) complican sobremanera una operación que sólo sería
viable en La Palmera tras un traspaso que dejara pingües beneficios en las arcas. No obstante, 'sotto voce', se continúa trabajando, esperando... y cruzando los dedos.
Al menos, el Betis y el resto de pretendientes de Bellerín ya conocen su
precio de salida, que los 'gunners' han rebajado respecto a los
35 kilos que solicitaban en enero pasado a todo el que preguntó por el carrilero derecho. Según varios medios ingleses, el Arsenal pide
20 millones de libras (unos 23 de euros al cambio) por el pase de Héctor, por lo que, incluso si la compleja hipótesis se da, habría que mejorar la propuesta desde la planta noble del Benito Villamarín, ya que no parece que vayan a dejar salir al otrora internacional español en forma de
cesión (ni siquiera remunerada) con
opción de compra, a menos que ésta sea, como mínimo, una
obligación.