Llegó el
'Día D' verdiblanco. Sin calculadoras ni los ya anacrónicos transistores de por medio. Sin posibles carambolas ni dependencia de terceros. Los de
Curro Segura tienen en su mano amarrar esta noche el regreso matemático a la
Liga Endesa, lo que redondearía una campaña cuasi impecable. Con 25 triunfos tras 29 jornadas, ganar en el feudo del
Real Canoe implicaría además la recompensa extra de batir una plusmarca histórica en la
LEB Oro, ya que ningún equipo ha conseguido sellar el pasaporte a la
ACB con cuatro partidos aún por delante.
El técnico nazarí ansia, como sus jugadores, el merecido premio, pero se desmarca de los excesos de confianza. "Vamos al campo de un equipo que quiere salvarse y va a salir a muerte. Es una cancha pequeña, con características a las que no estamos muy acostumbrados", advertía
Segura de cara a un encuentro para el que recupera a
Thomas Bropleh, al margen ante
Melilla y
Granada por problemas en una rodilla.
Enfrente, un debutante en la competición. Un
Real Canoe mermado por los problemas en la enfermería y que, más allá del duelo de esta noche, deberá focalizar todos sus esfuerzos en dos partidos clave frente a dos de los equipos que se encuentran en puestos de descenso,
C.B. Prat y
Cáceres. Ascenso frente a permanencia. Objetivos diametralmente opuestos, pero nivel de pulsaciones idéntico.
Los hombres de
Miguel Ángel Aranzábal afrontan la visita del líder tras ceder en el
Polideportivo Pisuerga ante el
Carramimbre Valladolid (96-79) y conscientes de la difícil empresa de aguar la fiesta a los sevillanos, concienciados y motivados para pescar su meta en
Pez Volador.Sólo un curso después de su descenso virtual en el
WiZink Center, la capital del
Reino podría convertirse ahora en un escenario amable y para el recuerdo verdiblanco. Un marco, en parte descafeinado -por no ser
San Pablo-, en el que firmar el regreso a su hábitat tradicional, en el que decir adiós a las luces de viernes noche y retomar la matinal de los domingos. En el que asegurarse de nuevo las visitas al
Palau Blaugrana, el
Buesa Arena o el propio
WiZink.
No cabe otra que ganar, no se concibe aplazar la alegría una semana más. Los
Bropleh,
Dee,
Stainbrook,
Costa,
Dani Rodríguez y compañía aspiran a hacer historia en Madrid, para satisfacción de una afición hispalense deseosa de volver a pensar en
ACB, de hacer cábalas con el plantel del retorno a la máxima categoría. Porque el 5 de abril de 2019 debe ser el
'Día D', el del desembarco en la
Liga Endesa un año después de abandonarla. Un viernes para recordar.