El
Real Betis se ha ejercitado en la mañana de este lunes en la Ciudad Deportiva Luis del Sol,
sin tiempo para un descanso que suple con la ilusión de su espectacular racha de nueve triunfos en los 11 últimos partidos que le hacen afrontar con confianza 10 días de infarto sin salir de Sevilla: este jueves, la vuelta de los dieciseisavos de final de la
Europa League contra el
Zenit de San Petersburgo; el domingo, el derbi liguero contra el
Sevilla FC en el Sánchez-Pizjuán, en el que puede consolidar su tercera plaza en
LaLiga y reducir a sólo dos puntos la distancia con el segundo escalón; y el jueves siguiente, 3 de marzo, el segundo duelo de las semifinales de la
Copa del Rey ante el
Rayo Vallecano.
En la soleada mañana de este lunes en la capital de Andalucía,
Manuel Pellegrini ha dirigido la
clásica sesión con trabajo de recuperación y descarga para los jugadores que fueron titulares en la victoria del domingo contra el
RCD Mallorca (2-1) y con ejercicios de
alta intensidad para los suplentes y los que no tuvieron minutos. O, lo que es lo mismo traduciendo al exitoso idioma del Ingeniero:
dosificó fuerzas de algunos pesos pesados y comenzó a activar al grupo del que a buen seguro saldrán más de la mitad de los
titulares en el choque del próximo jueves contra el Zenit.
Y es que no hay motivo alguno que invite a alterar la
engrasada maquinaria de rotaciones con la que el técnico chileno tiene activado a toda la plantilla de un Betis que sigue compitiendo al más alto nivel en los tres frentes,
único equipo español vivo en las tres competiciones y también el único de LaLiga que enlazó victoria continental entre semana con otra liguera este finde. Da igual quién venga después del Zenit (ni más ni menos que el Sevilla FC y una semifinal de Copa). El equipo seguirá rotando, algo que contó con el respaldo de un aplastante 84 por ciento de los participantes en la
#EncuestaHelvetiaED.
Entre los que volvían en el último partido estaban, ni más ni menos que
Sergio Canales y Nabil Fekir. Nadie lo diría viendo la racha de resultados, pero el '10' y el '8'
no coincidían sobre el césped desde el pasado 6 de febrero, cuando el Betis perdió en casa ante el Villarreal (0-2). Sin los dos a la vez, el cuadro verdiblanco sacó adelante sus partidos frente al Rayo, el Levante y el Zenit. Pero, Mauricio Pellegrini les necesitaba. El cántabro, recuperado tras dar positivo por coronavirus, y Fekir, de vuelta tras la sanción en Europa, regresaron para dirigir una sufrida victoria ante el Mallorca.
Además de Canales y Fekir, el técnico bético refrescó el equipo con el lateral
Héctor Bellerín, los centrales
Marc Bartra y Víctor Ruiz, el medio luso
William Carvalho y el punta
Borja Iglesias respecto al once que ganó por 2-3 en San Petersburgo. Sustituyeron a
Sabaly,
Pezzella, Edgar González, Joaquín Sánchez,
Andrés Guardado, Aitor Ruibal y Willian José, respectivamente. Para estos 10 días, cuenta con la baja segura de Martín Montoya y está pendiente de la evolución de los lesionados Camarasa, Rodri y Miranda.
Canales fue un huracán incontrolable. Ofreció un
recital de pases que encontró en la cabeza de Álex Moreno a un buen socio para abrir el marcador. Fekir, mientras, aportó
frescura a la hora de tomar los mandos del choque. Y, juntos, condujeron al Betis hacia un 2-1 vital para mantenerse con firmeza en puestos de Champions gracias a la segunda mejor puntuación de su historia a estas alturas de temporada.
Desde la
1996/1997, hace 25 años, el Betis no había llegado a estas alturas de curso con más puntos que ahora.
Entonces sumaba 50 y ahora acumula 46, después de su victoria por 2-1 contra el Mallorca en el estadio Benito Villamarín. Sus 14 triunfos también hansido irrepetibles desde esa misma 96/97, al igual que sus 47 goles a favor. Entonces llevaba 55.
"No creo que el equipo se haya dosificado. Hemos ganado 2-1 y
no podemos ganar todos los partidos por cuatro goles. Venimos de jugar partido entre semana y se ha acumulado el desgaste mental y físico de poder mantenernos en todas las competencias. El Mallorca venía de ganarle al Athletic y de hacerle dos goles y no siempre se puede superar a un rival con tanta contundencia. Los equipos son parejos en la liga y no es normal ganar siempre por cuatro goles.
Más que sufrir, me gustó muchísimo la manera en que ganamos hoy", manifestó Pellegrini al término del encuentro. Su gestión de recursos sigue siendo de matrícula de honor.