En el mundo del fútbol cada vez es más frecuente la irrupción de jóvenes talentos como el de
Ilaix Moriba, del FC Barcelona, prometedores futbolistas que sorprenden a pesar de su corta edad. Pero también hay cada vez más casos de jugadores que superada con crece la barrera de los 30, rinde a un mejor nivel si cabe que cuando tenían 20 años. De estos también hay unos cuantos casos en nuestra Liga. Nombres como
Rubén Castro, que no para de meter goles con el Cartagena en Segunda, el incombustible
Nino, del Elche, el bético
Joaquín Sánchez, a punto de cumplir los 40, o el otrora bético
Jorge Molina (38).
Precisamente este último, a sus 38 años, diez meses y 16 días, se convertía este domingo en el
quinto jugador más veterano en anotar un gol superando al mítico jugador del Atlético de Madrid Larbi Ben Barek, que anotó su último gol con 38, diez y cuatro.
Molina entra a formar parte así de un selecto grupo en el que se encuentra en cuarta posición
Joaquín, quien anotó su último gol el pasado 24 de enero ante la Real Sociedad (2-2), a sus 39 años, seis meses y 7 días. En tercera posición de este particular top 5 aparece
Alfredo Di Stefano, quien a sus 39 años, siete meses y 20 días firmó su última diana siendo jugador del Espanyol en la temporada 65/66.
César Rodríguez, con el Elche en la temporada 59/60, es el segundo goleador de la historia de LaLiga más longevo, y corona la lista el brasileño
Donato Gama, quien firmó cumplidos ya los 40 el que es hasta el momento el gol más 'viejo' del campeonato doméstico.
Con el delantero alcoyano, se da la curiosa circunstancia de que de los
54 goles que ha anotado en Primera división, sólo cinco de ellos los hizo antes de los 30, con lo que se cumple con creces eso de que está mucho mejor ahora que a los 20.