Claudio Bravo, cancerbero del
Betis, regresó al once después de tres jornadas ausente por lesión. El chileno, a la conclusión del partido, señaló que: “Triste porque no plasmamos lo que veníamos mostrando. No tuvimos la contundencia de otros partidos y nos vamos con un sabor de boca amargo. Era una prueba complicada. La
Real juega bien, te aprieta. Era un momento idóneo para dar un golpe”.
Pese al traspié, el portero verdiblanco mira hacia adelante. “No queda otra que seguir trabajando y los resultados llegarán”, consideró, aunque sí matizó que deben encontrar cuanto antes la regularidad: “Eso tenemos que evitarlo. Hay que mostrar un nivel medio, no un gran partido y otros, un desastre. Hay que trabajar duro; este tipo de partidos nos sirve para seguir creciendo. Debemos seguir de la misma manera. Apretar los dientes. Es parte del crecimiento; si queremos estar arriba no podemos desaprovechar estas oportunidades”.
En cuanto a las acciones polémicas, como el gol anulado a Sanabria o el agarrón de Le Norman sobre el guaraní, no opinó. “Me toca estar demasiado lejos, pero no es mi labor opinar. No estoy sentando viendo las decisiones, sólo hago mi trabajo”, señaló.
Respecto a su regreso al once tras superar su lesión, indicó que: “Me he encontrado bien, un poco con molestias, pero normales. Me preparé muy bien la semana”.