El Betis recuperó la sobriedad defensiva en el momento más indicado, justo antes de viajar el jueves a Valencia para asaltar Mestalla y clasificarse para la final de Copa. Tras el 2-2 en la ida disputada en el Benito Villamarín, los de Setién acudirán a la capital del Turia con la firme intención de no encajar goles, para que así les valga con meter uno para estar en la cita del próximo 25 de mayo.
Después de que el Rennes se cebase y explotase todas y cada una de sus concesiones, la zaga verdiblanca había quedado en entredicho. Sin embargo, ante el Valladolid recuperó toda la credibilidad perdida, al repeler los 49 centros que los locales hicieron llover sobre su área y después de dejar Pau López dos grandes paradas; sobre todo, la mano de hierro que sacó abajo para frenar un cabezazo de Sergi Guardiola. Así, el Betis volvió a dejar a cero su portería; algo que no lograba como visitante desde el 13 de diciembre (en un 0-0 contra el Dudelange).
Fue la séptima vez que termina imbatido un partido a domicilio en lo que va de temporada, tras la citada visita a Luxemburgo y los desplazamientos a Mendizorroza (0-0), Mestalla (0-0), el Georgios Karaiskakis de Atenas (0-0), a Montilivi (0-1), Campos de Sport de El Sardinero (0-1). Es decir, que en Pucela echó el cerrojo a su portal por primera vez en lo que va de 2019, fuera de casa; ya que en Heliópolis se fue sin goles contra el Atlético (1-0), el pasado día 2, y ante la Real Sociedad (0-0), el 10 de enero; amén de otras seis veces antes del final de 2018. Así, en total, este Betis ha dejado ya su portería a cero en 16 ocasiones este curso y -según @LaLigaenDirecto- está en sus mejores cifras defensivas en los últimos seis años y a sólo un partido más imbatido de su récord histórico (que son 17).