Jordi Amat, que mandó “todo el ánimo del mundo” para su compañero Feddal, calificó el partido de “bonito. Hasta la expulsión, los dos equipos querían tener el balón. La expulsión fue determinante, pero también la actuación de Loren, que fue espectacular. Con el penalti, se nos complicó el tema, pero el equipo trabajó muchísimo”.
El catalán se mostró “feliz con los 30 puntos”, que valen “para seguir soñando”. El ayer pivote vio “un partidazo de todo el equipo, pues era un partido muy difícil” ante un Villarreal que les hizo “sufrir más de lo cuenta” con un penalti que, para él, “no fue”.