El
Betis y el
Racing Club de Estrasburgo se encuentran en la
fase final de las negociaciones para cerrar el traspaso al club francés de
Jonas Martin, que regresará a su país sólo un año después de cambiar
Montpellier por La Palmera por 2,5 millones de euros, cifra que el club trabaja para recuperar.
El conjunto verdiblanco quería sacar plusvalía con la venta del centrocampista francés, pero se vio obligado a bajar sus pretensiones después de que se fuera al traste una operación con el
Bursaspor turco que estaba muy encarrilada y que entró en un callejón sin salida cuando comenzaron a discutirse algunos aspectos financieros; unos problemas que el
Estrasburgo aprovechó para mejorar la primera oferta que sólo unos días antes había hecho llegar a las oficinas del
Benito Villamarín. Ésta era de una cesión con opción de compra, misma fórmula que intentaron con anterioridad
Angers, Caen y Toulouse.
El
Estrasburgo se compromete a abonar esos
2,5 millones de euros, pero a día de hoy no dispone de liquidez y los clubes están negociando las formas de pago, aspecto en el que trabajan con dos alternativas. Una de ellas pasaría por fijar una
cesión con obligación de compra de esa cantidad y, la segunda, cerrar ya un
traspaso que el conjunto de la Alsacia podría pagar en
dos plazos: una pequeña cantidad a la firma de los contratos y el grueso de la partida económica, en el verano de 2018.
De un modo u otro, en
La Palmera dan ya por hecha la salida de
Jonas Martin, a pesar de que, según explicó
Setién, su ausencia en el amistoso que el Betis disputó el pasado viernes en Lepe ante el Vitória Setúbal se debió a unas molestías físicas y no a su ya inminente salida. No obstante, ni al jugador ni al club le interesaba que forzase.