Lectura positiva, pese a la derrota por 2-1 en
San Mamés, de la actuación del pasado jueves del plantel verdiblanco ante el
Athletic Club, un rival superior y especialmente fuerte en su casa frente al que los verdiblancos no perdieron la cara al partido en ningún momento. Una reacción que, con la permanencia amarrada matemáticamente y sin nada en juego, se antoja tardía entre el beticismo, pero de la que hay varios factores que resaltar.
Y uno de ellos, lógicamente, fue el partido jugado por el canterano
Álex Martínez, quien completó el encuentro y aprovechó la oportunidad brindada por
Víctor Sánchez del Amo en los deseos del técnico madrileño de darle refresco a los más habituales. Y es que el lateral izquierdo participó en el 2-1, amén de un importante trabajo defensivo durante los 90 minutos de partido.
De hecho, el de Sevilla Este fue el futbolista que más recuperaciones de balón realizó durante el encuentro, con un total de 11; las mismas que su rival
De Marcos. Un trabajo en defensa que también completó con un bloqueo y con tres duelos aéreos, de siete, ganados, siendo el bético que más brilló en dicha tarea.
En definitiva, una destacada labor en su vuelta a la titularidad, habiendo participado en 12 partidos de
Liga (893') en la que, a priori, será su última temporada como bético. Cumple contrato a final de campaña y la intención del
Betis, en principio, es la de no seguir contando con él, de ahí que el canterano no dude en aprovechar hasta la más mínima oportunidad que le brinde Víctor en este tramo final de temporada, del que su futuro dependerá en gran medida. Ofertas, seguro, no le faltarán de rayar siempre a ese nivel.
Y es que la intención de la dirección deportiva verdiblanca es la de remozar ambos laterales, esperando hacer caja con
Durmisi (el fichaje con mejor rendimiento) y con
Piccini, quien tiene un relevante cartel en Italia.