Matías Nahuel Leiva tiene cada vez más papeletas para
salir del Betis en el próximo mercado invernal. Ayer tampoco entró en la convocatoria para el partido de Copa contra el Deportivo y cuando vuelva la competición habrán pasado
más de dos meses desde que disputara sus últimos minutos con la camiseta verdiblanca en el partido contra el Villarreal que supuso el adiós de Poyet.
Con Víctor no se ha estrenado y sólo ha entrado en las convocatorias de los partidos contra el Celta y el Deportivo.
El esquema que está utilizando el técnico, y que también se ha llevado por delante a uno de los jugadores que más expectación generaba en la grada como
Musonda, no favorece las cualidades del extremo cedido por el Villarreal, de ahí que lo lógico sea que busque una salida para contar con más minutos.
Su reciente paternidad, su pareja dio a luz el lunes, también ha podido ser el motivo para que no entre en la última lista del año, algo que
ya le pasó a Mandi anteriormente.
Cedido por dos temporadas por el Villarreal para buscar los minutos que le negaban en Castellón, Nahuel intentará tenerlos lejos del Villamarín. El pasado verano, el
Sporting de Gijón fue el equipo que más pujó por él junto al Betis, aunque fueron los verdiblancos los que se llevaron el gato al agua. Sería una opción en Primera, mientras que en Segunda también tendría mercado.
De hecho, este miércoles ha trascendido
el interés del Real Zaragoza por hacerse con sus servicios. Según
Heraldo, la secretaría técnica del club blanquillo ha pedido información sobre la situación de Nahuel, para saber si existe posibilidad de que el Villarreal rompe su préstamo al Betis y pueda arribar a La Romareda en calidad de cedido.