El Fundación CB Granada disfrutará una temporada más de la Liga Endesa. Tras una temporada más bien engorrosa, el conjunto granadino apuró todas las opciones para permanecer en la élite del baloncesto español. Y lo logró con mérito, teniendo en cuenta que alcanzó el objetivo partiendo del presupuesto más inferior de la tabla. En suma, el hecho de hacerlo de forma acrobática gracias a tres triunfos en sus tres últimos choques hizo que la afición fascinara. Ello provocó que el conjunto granadino optase por hacer una rúa en autobús descapotable. Así las cosas, ahora el objetivo es el de asentar el proyecto.
En una entrevista para Granada Hoy, Óscar Fernández-Arenas hizo un análisis de la temporada que está a punto de llegar. Tras el éxtasis que supuso el fin de campaña anterior, ahora todo está más tranquilo: “El año pasado fue un ‘caos’ con todo lo relacionado con el tema de la documentación y los trámites que tuvimos que hacer para la inscripción en la competición. Este verano ha sido todo mucho más fácil y ha ido más rodado. Al margen del tema de documentación, tuvimos que explicar a todos nuestros nuevos patrocinadores qué significaba estar en la ACB”.
A falta de cerrar una llegada más, la plantilla del Covirán Granada está conformada. Tras las llegadas de Yiftach Ziv, Germán Martínez, David Kramer, Kairys y Cheathnam, y las salidas de Luke Maye, Jacobo Díaz, Petit Niang, Álex Renfroe y Thomas Bropleh, el plantel granadista no espera muchos movimientos más. Si bien, se trata de una completa revolución: “Si se mira el histórico de nuestras temporadas, cuando ascendemos siempre mantenemos la base porque entendemos que debemos premiar a esos jugadores que han llevado al club a una categoría superior. Lo hemos hecho desde Primera Nacional y hasta la ACB. Consideramos que el primer año, como mínimo, teníamos que darle la oportunidad a esos jugadores de jugar en la Liga Endesa. Los que nos han llevado ahí se merecían esa recompensa”.
Con la llegada de Yiftach Ziv, solo queda un jugador por llegar. Óscar confesó que se busca “un 3-4 que sea más polivalente. A ver lo que deja el mercado y lo que nos deja la economía también pero es lo que nos falta. Se está mirando el mercado, y Pablo Pin y su cuerpo técnico están tratando de cerrar lo antes posible el equipo pero tampoco tenemos prisa. Creo que se han hecho muy bien los deberes y ahora no hay que tener ninguna urgencia pero considero que se nos está quedando un equipo bastante redondito”.
Una de las operaciones de mayor calibre del mercado rojinegro fue la renovación de Thomasson, dadas las pretensiones económicas del jugador. “El problema fue que sabíamos que económicamente no podíamos llegar a su último contrato. Pero esas pretensiones económicas no nos la había hecho llegar a él, sino que nosotros entendíamos que no podíamos llegar. Pero fue el propio jugador el que dejó una puerta abierta para seguir a Granada. Pablo Pin habló con él y yo con su agente y le hicimos una oferta que estaba entre lo cariñoso pero que suponía un gran esfuerzo por nuestra parte, pero que no se acercaba a las pretensiones económicas que había tenido en años anteriores. Sin embargo, el jugador valoró más la opción de vivir en Granada y de trabajar con un cuerpo técnico que ya conoce porque se llevó una imagen maravillosa de la ciudad. Ha valorado vivir en Granada tras hacerlo en San Petersburgo o Patras, su familia esté muy a gusto aquí en Granada y él espera hacer su mejor baloncesto.
Sobre el aumento de presupuesto, el máximo responsable del club afirmó lo siguiente: “Lo hemos aumentado un 10% porque la ayuda de las empresas está siendo algo mayor. Además, por la campaña de abonados fijamos el curso pasado una cifra muy inferior a la real de ahí que ese dinero lo empleáramos en reforzar el equipo después de todo lo que sucedió con las lesiones. Fue un gasto importante al final el que se hizo”