El análisis del Leicester-Sevilla

Ingenuo y torpe, como Nasri

Alejandro SáezAlejandro Sáez
Seguir
2 min lectura
Ingenuo y torpe, como Nasri
- Alejandro Sáez
Que sí, que el Sevilla es tercero en Liga con 57 puntos y que la temporada está siendo para enmarcar, pero ayer se jugaba el pase a cuartos en el King Power Stadium, donde los de Nervión pecaron de ‘amateuristas’ y se echó mucho de menos aquello de la ‘casta y el coraje’ de otros tiempos. Y es que Jorge Sampaoli, ayer, se equivocó de inicio, adelantándose el Leicester en una primera mitad en la que demostró hacer mucho daño mientras presionaba arriba o le dificultaba la existencia cuando se echaba atrás con el 1-0 en el marcador, haciendo prácticamente infranqueable el área de Schmeichel. El 4-2-3-1, en el que Mercado jugaba de lateral derecho, desempeñándose Sarabia por delante, y en el que la punta de lanza era propiedad de Ben Yedder con la clara intención de hacer valer su movilidad ante la pesadez de los centrales ‘foxes’, no permitió al Sevilla morder, de ahí que el de Casilda hiciera borrón y cuenta nueva tras el paso por vestuarios. Una metamorfosis que desdibujó a los de Nervión en un 4-4-2, dándole entrada a Jovetic y Mariano en el campo y cargándose de un plumazo a toda una banda derecha que no carburó durante los primeros 45’.

Pero más de lo mismo, un Sevilla ingenuo en la entrega que pecó de torpe en el segundo de los ‘foxes’. Y para torpe, un Samir Nasri fallón que cayó en la trampa de Vardy, autoexpulsándose ante la provocación de la estrella del Leicester. Y así, con uno menos y errando un penalti, pues es totalmente imposible hacer historia, pues lo de ayer, a pesar de todo lo bueno hecho hasta la fecha por este Sevilla, quedó en un fracaso histórico. Así, no.