Alvaro Arenillas4 min lecturaHace tiempo que se volvió una constante en los grandes torneos del circuito ATP. Las jornadas –sobre todo de los Grand Slams– se alargan tanto que a veces el último turno de juego se va casi a la madrugada. En su día ocurrió con Novak Djokovic e incluso Jannik Sinner se negó a disputar un partido del Masters 1.000 de París al terminar su anterior choque a las 2 de la mañana del día anterior. Pues bien, en la tercera jornada del Open de Australia ha sido Carlos Alcaraz quien ha echado el cierre.
Aunque el partido del murciano estaba programado para las 11:00 horas del horario peninsular español, la realidad es que en el país oceánico comenzaba ya a las 21:00 horas; es decir, de noche y con muchas opciones de que se alargase hasta tarde, ya que en los major se juega el mejor de cinco sets. Pues bien, pese al nuevo plan de la ATP para evitar problemas con los horarios –ahora lo detallamos– Alcaraz ha estado cerca de terminar de jugar contra Richard Gasquet al día siguiente.
Con el encuentro comenzando algo más tarde de lo previsto, y aunque el español ha vencido en tres sets, la duración del mismo ha sido de dos horas y 21 minutos, lo cual ha llevado que se acercasen a la medianoche. Cuestionado por ello, el número 2 del mundo se ha quejado porque le gusta más competir durante el día, pero ha admitido que las condiciones en pista no eran malas.
"Las condiciones de esta noche me han gustado porque no ha hecho mucho viento. Siempre prefiero jugar de día para hacerlo todo a un ritmo bueno, aunque las condiciones tenísticas de hoy no han estado mal", explica.
Para evitar que los partidos se marchen hasta demasiado tarde, la ATP aprobó hace escasas fechas una serie de directrices sobre ello. Así, se ha establecido que no se jugarán más de cinco partidos por pista en una jornada, que a partir de las 23:00 horas no arrancará ningún partido (salvo aprobación de los supervisores del torneo), que un partido sin pista disponible a las 22.30 horas será cambiado a otra pista y que la sesión nocturna comenzará a las 19:30 horas (se recomienda hacerlo antes). Todo esto con el objetivo de evitar que los tenistas acaben jugando demasiado tarde.
Más allá del tema de la hora, Alcaraz no ha terminado del todo contento con su trabajo al resto frente a Gasquet, algo que entiende debe mejorar para encarar los siguientes partidos del mismo con ciertas garantías.
"He tenido muchas oportunidades de break en el primer set que no he aprovechado. Es normal después de dos meses sin competir. Además, los primeros partidos son un poco más difíciles. Me ha ayudado mucho en esta primera ronda tener estos problemas. En la mayoría de partidos necesito muchas oportunidades para hacer los breaks, es algo que quiero mejorar. Aunque también estoy mejorando el que no me afecte e ir hacia adelante punto a punto", comenta el español, que se enfrentará el jueves en segundo ronda a Sonego.