Sin Copa del Rey ni Champions, al Sevilla FC no le queda otra carta por jugar que LaLiga. Restan poco más de dos meses para el final de la competición y el conjunto de Lopetegui, con un partido más por disputar que sus rivales directos,
se juega en 13 encuentros el objetivo principal de la temporada, que no es otro que lograr un nuevo billete para la máxima competición continental.
La eliminación nervionense a manos del Borussia Dortmund ha descuadrado el presupuesto y obligará a vender en verano, por lo que se antoja fundamental volver a gozar de los ingresos de la Liga de Campeones la próxima campaña. Y para ello,
el Sevilla FC debe apretar los dientes y mejorar lo realizado en la primera vuelta ante los mismos rivales que tendrá de nuevo enfrente.
El camino comienza nada más y nada menos que con
el derbi de este domingo, al que el Betis llega en su mejor momento de los últimos tiempos. Sin duda, un choque vital para marcar distancias, más si cabe por el hecho de que el miércoles siguiente, el cuadro sevillista tendrá
una bola extra en el partido aplazado ante el Elche, esta vez en casa. Será la primera de las
cuatro citas intersemanales de un calendario que, pese a todo, se suaviza y sí ofrecerá al fin a Lopetegui la posibilidad de contar con semanas completas de trabajo. Además,
tras el choque del próximo sábado 20 de marzo ante el Valladolid, en Zorrilla, llegará un parón motivado por los compromisos de las selecciones, que servirá para recuperar fuerzas pese a la previsible diáspora de internacionales sevillistas.
Tras ese receso, tendrá lugar un
comprometido choque ante el líder, el Atlético de Madrid, en el Pizjuán. Sin duda, el duelo más complicado a priori junto a la visita al Bernabéu para medirse al Real Madrid ya en el mes de mayo, en la jornada 35. Pero, además, a los sevillistas les aguardan
dos duras salidas ante una Real Sociedad que es su principal perseguidor a día de hoy (entre semana, a finales de abril) y frente a un
Villarreal que se ha descolgado pero peleará a buen seguro por Europa (en la penúltima fecha).
También le tocará medirse al Sevilla FC a
un trío de aspirantes a plazas europeas compuesto por Celta, Granada y Athletic, con la necesidad de 'vengar' en casa las derrotas a domicilio de la primera vuelta ante nazaríes y bilbaínos, mientras que
cerrará el campeonato frente a un Alavés que en estos momentos lucha por eludir el descenso, también como local y quien sabe si para esas fechas, con el aliento de su público en las gradas.
El turno de citas intersemanales, por su parte, se completará con
dos encuentros ante rivales de la zona templada: en el feudo del Levante (21 de abril, si bien el fin de semana anterior no habrá liga por la final de Copa)
y en casa frente al Valencia (12 de mayo). En total, siete encuentros en casa y seis a domicilio, ante unos adversarios con los que
sumó 20 puntos de 39 posibles en la primera vuelta, fruto de seis victorias, dos empates y cinco derrotas.
De repetir lo realizado esta campaña ante esos mismos rivales, por tanto, el Sevilla FC alcanzaría los
68 puntos, cifra que ni mucho menos asegura a priori la cuarta plaza. De hecho, en
cuatro de las cinco últimas campañas, siempre se necesitó una mayor cifra de puntos, protagonizando el propio conjunto nervionenses tres de esos casos, al ser cuarto en en la 14/15 con 76 puntos, en la 16/17 con 75 y en la 19/20 con 70 unidades. Toca por tanto apretar los dientes y volver a pisar el acelerador.
El gran objetivo del curso está en juego.