El partido ante el
Valladolid dejó un mal sabor de boca en el
Sevilla pues se perdió la oportunidad de sumar tres puntos muy importantes en la lucha por los puestos de la
Champions. Los de
Sergio González compitieron a un gran nivel y pusieron las cosas muy difíciles a los nervionenses, que sufrieron hasta el final para conseguir algo positivo.
Buena muestra de ese sufrimiento lo reflejó desde la banda mientras calentaba
Sergio Reguilón. Las cámaras de
El Día Después siguieron a un nervioso Reguilón que no paró de sufrir y de alentar a sus compañeros mientras esperaba su oportunidad para entrar.
La afición sevillista ha alabado la actitud del jugador cedido por el Real Madrid, que
no dejó de sufrir hasta el pitido final del encuentro como cualquier sevillista que vio el choque desde su casa.