Tras el choque ante el Málaga,
José Castro corroboraba que el fichaje de
Lucho González se encontraba
"prácticamente" descartado, aunque al mismo tiempo advertía de que "todo puede ocurrir hasta el día 31".
El club de
Nervión, efectivamente, se había dado un plazo antes de cerrar esa puerta definitivamente, tal y como reconoció ayer el agente del jugador en Canal Sur Radio, pero a día de hoy, "no hay nada que hacer".
Según
Federico Simonian, apoderado del centrocampista, "no es cuestión de ilusionarse en vano", puesto que el
Al-Rayyan se muestra
intransigente y no está por la labor de pagarle ahora la importante suma de dinero que le debe. La intención del club qatarí es que
Lucho perdone esa deuda a cambio de recibir la libertad, pero el futbolista también se muestra inflexible en este sentido. Es decir, que las posiciones de uno y otro se encuentran frontalmente enfrentadas y no van a variar,
salvo giro inesperado de los acontecimientos, por lo que su llegada, ahora sí, se puede dar por descartada.
A sus 34 años, el ex de
Oporto y
Marsella se ha resignado a continuar en
Qatar hasta el mes de junio, momento en el que finaliza su contrato con el club árabe, siendo del todo improbable que pueda aterrizar en el
Pizjuán el próximo verano. Para entonces,
Monchi deberá atar a otro mediocentro ante la más que posible marcha de
M'Bia, que queda libre, pero la edad del argentino le aleja del perfil que debería tener su sustituto.