Alejandro Sáez3 min lecturaLa portada de ESTADIO Deportivo para el viernes 4 de octubre de 2024:
El Betis, avisado para el derbi: Sin descanso y con nefastas sensaciones tras un estreno en la liguilla de la Conference League en el que evidenció su falta de gol sin Lo Celso. Así llega el Betis al duelo cainita frente al Sevilla. Tras perder por 1-0 frente al Legia en Varsovia, los verdiblancos arriban al derbi de este domingo sin gol ni confianza. Pellegrini, por su parte, lamentó "rendimientos extraños" y sentenció sobre el duelo de máxima rivalidad de este domingo.
Isaac Romero se apunta: El canterano se ha ejercitado con normalidad a sólo cuatro días de que se dispute el derbi sevillano contra el Betis. Se ha estado recuperando de un esguince de tobillo que se hizo contra el Alavés en Mendizorroza.
El Sevilla FC de García Pimienta, como no podía ser de otra forma, también se prepara para la cita liguera de este domingo en el Sánchez-Pizjuán. Una fecha en el calendario que el técnico sevillista viene trabajando en lo mental, haciéndole ver a sus jugadores que no puede volver a repetirse nunca el partido de Mendizorroza.
Mbappé preocupa al Real Madrid: Mbappé se esforzó para volver en siete días de una lesión muscular que a priori le pararía tres semanas y no obtuvo buenas sensaciones durante los minutos que jugó en Champions ante el Lille
Sin paliativos; batacazo 'txuri urdin' ante el Anderlecht (1-2). El cuadro belga se llevó los tres puntos del Reale Arena en un encuentro marcado por los incidentes con los ultras belgas, que destrozaron la grada y lanzaron objetos contra las familias blanquiazules. Imanol Alguacil fue claro con lo sucedido: "Es una vergüenza". El técnico vasco, enfadado por la derrota y los incidentes de los belgas, asegura que "es una pena y hay que cortarlo de raíz de una vez por todas antes de que ocurra una desgracia".
El Athletic, por su parte, aprueba con nota frente al AZ Alkmaar, imponiéndose por 2-0. El conjunto bilbaíno consigue sumar tres puntos claves en un encuentro que dominaron. No obstante, el AZ se resistió y supo sufrir hasta que Iñaki Williams abrió la lata.
