Los campeones de la NFL, los Kansas City Chiefs, son un emblema del deporte estadounidense, ya no solo por su nivel sobre el campo, que les ha llevado a convertirse en una dinastía que además de los últimos dos campeonatos, ha estado en las cinco últimas finales de conferencia, ganando tres superbowls desde 2020 y quedándose a las puertas de otra en 2021, donde Tom Brady y su Buccaneers fueron muy superiores. Sin embargo, han formado una columna vertebral a las que muy pocos equipos pueden hacer frente y con Patrick Mahomes a la cabeza están a la vanguardia de la liga.
Pero ahora les ha surgido un nuevo problema, su estadio. Arrowhead es uno de los lugares más emblemáticos de toda la historia de la NFL, pero se está quedando muy anticuado en comparación a los brutales feudos que se han hecho equipos como Los Angeles Rams en el SOFI Stadium, o Las Vegas Raiders en el Allegiant Stadium. Por eso mismo, los campeones no podían estar tan a la zaga de la modernidad, pero también tienen muy enraizada a su afición a ese lugar de la ciudad, que aunque está realmente en medio de la 'nada' y rodeado de descampados, es ya un lugar sagrado de peregrinación, ya no para los aficionados de los Chiefs, si no para cualquier fan de la NFL. Por eso mismo, solicitaron a Kansas City una ayuda pública de 600 millones de dólares que le permitiera llevar a cabo una gran remodelación. Sin embargo, esto no va a poder ser posible, ya que los propios ciudadanos de la ciudad se han negado a ello, votando en contra de esa ayuda en el referéndum sobre la posibilidad de llevarla a cabo organizada por la ciudad de Misuri.
Esto es un nuevo varapalo para Clark Hunt, el propietario de los Chiefs, que ya sufrió uno recientemente, cuando su franquicia fue votada por los propios jugadores como la peor para jugar; ya que las infraestructuras, la propiedad, las facilidades y las comodidades de la ciudad estaban muy lejos de lo esperable de un equipo de este nivel. Sin embargo en el campo no se ha reflejado, y la unión entre Mahomes y Kelce sigue más viva que nunca, y Andy Reid es ahora mismo el mejor entrenador de la liga, incluso los problemas con la justicia de algunos miembros de la plantilla no serán impedimento para mantenerse arriba; falta por ver si en Kansas City u en otro sitio.