Francisco Salas4 min lecturaLa Vuelta a España arranca este sábado en Lisboa y durante tres semanas va a llevar por las carreteras de la Península a muchos de los grandes ciclistas del panorama mundial, toda vez que buna vez pasado el Giro de Italia, el Tour de Francia y los Juegos Olímpicos, no son pocos los objetivos que les quedan a los grandes del pelotón. Y de hecho, esta edición iba a ser algo descafeinada, o eso se podía pensar hace unos meses, sin embargo, no ha sido así y muchos de los que han fallado en alguna de las pruebas anteriormente mencionadas serán de la partida. De hecho, solo faltará uno con el que se soñó hasta el último momento, Tadej Pogacar.
El esloveno del UAE tenía en su mano la posibilidad de conseguir las tres grandes vueltas el mismo año, pero al final ha decidido, en consonancia con su bloque, decir adió a su sueño y centrarse en el mundial. Y si hay alguien que lo lamente y que lo va a echar mucho de menos, ese es Javier Guillén, el director de la carrera, que se lo ha dejado claro a la agencia EFE. "Siempre queremos que vengan todos, los mejores, pero este año no tendremos a Pogacar, ganador del Giro y del Tour. Me hubiera encantado que viniera, pero entiendo sus razones". Aún con eso, está más que contento con el cartel que ha sacado.
Guillén cree que "los corredores presentes en la Vuelta son muchos y buenos" y espera un gran duelo entre "españoles y extranjeros" destacando "por una parte a Enric Mas, Mikel Landa y Carlos Rodríguez y por otra a Primoz Roglic, Sepp Kuss, Richard Carapaz, Joao Almeida y Adam Yates". Realmente faltan muy pocos de los grandes capos, quizá solo los dos ocupantes del podio del Tour junto a Pogi, Jonas Vingegaard y Remco Evenepoel. "Vingegaard salió de una lesión, hizo el Tour y ahora quiere estar con su mujer para el nacimiento de su segundo hijo. Y Evenepoel hizo el Tour y luego unos Juegos Olímpicos estelares.
Guillén se ha esmerado en hacer una vuelta que sea emocionante y tenga al espectador pegado a la televisión desde el día 1 hasta el 21, y para ello, los ciclistas van a sufrir. "Será una Vuelta dura, con tres partes diferentes. La primera semana con Sierra Nevada, donde puede influir el calor. Luego la segunda con el bloque asturiano, con el Cuitu Negru y Lagos de Covadonga como puntos claves, y luego la tercera con Picón Blanco y la crono de Madrid. Ojalá esté la carrera abierta hasta la crono. Entre medias habrá muchas etapas con trampa, difíciles de controlar, que pueden dar la sorpresa, por ejemplo, la de Jerez y Yunquera".