Antonio José Medina4 min lectura"Quiero intentarlo una vez más, aunque no tengo ninguna prisa. El bádminton tiene que ser algo que a mí me motive. Pero hay una esperanza, en dos años, en 2026, y me haría mucha ilusión jugar el campeonato de Europa en España. Hay muchas posibilidades de que sea en Huelva", decía hace unos días Carolina Marín en el programa Planeta Olímpico de Eurosport, confirmando lo que todos los aficionados querían oír, que quiere volver a la cúspide del bádminton, aunque sólo sea para cumplir su último sueño.
Ese lo viene repitiendo a lo largo del último mes y ya ha dejado claro en más de una ocasión que es el que le sirve de principal motivación para forzar ese regreso. Su idea es jugar el Europeo 2026, que se va a disputar en el España y por el que puja seriamente la ciudad de Huelva. Sería el colofón a su carrera deportiva, aunque no ha querido nunca confirmar que sea su final. Pero se intuye...
Marín sí ha dejado claro que no va a volver a un Mundial o al circuito asiático y que, por eso, insiste tanto en lo de decir adiós en un Europeo. No podría encontrar un adiós más emblemático. "Sería un sueño retirarme en mi casa, pero no quiero planteármelo todavía porque depende de muchas cosas que no puedo controlar", repite la jugadora onubense en una entrevista facilitada por 'Helios', marca de la que es imagen.
Marín ya vislumbra ese final y, por eso, empieza a mirar atrás y a ver su legado y lo que aún puede aportar en las pistas y fuera de ellas. "Mi deseo es poder ayudar a las nuevas generaciones y, desde mi experiencia, aportar en otros ámbitos fuera del deporte. (...) Es cierto que mi vida ha sido diferente a la de otras personas de mi edad, pero también he conseguido cosas únicas. Simplemente he seguido el camino que mi carrera requería y estoy orgullosa de lo que he alcanzado", afirma Marín.
La campeona olímpica onubense se queda, de su carrera, con el "esfuerzo" que ha realizado y realiza "más allá de las medallas". "Siempre me ha gustado destacar que no sólo importan los resultados, sino también el proceso y el camino", afirma una Carolina Marín que siempre tiene el nombre de su tierra en la boca. "Seguir ligada a mis raíces es algo esencial para mí. Y llevar el nombre de Huelva por todo el mundo es una responsabilidad que asumo con gusto y orgullo", añade.
Si ella está orgullosa, encuentra ese apoyo en la marca a la que representa (Helios) y, en este caso, lo transmite su director de Marketing, Iker Asolo. "Carolina representa a la perfección los valores que nos definen: la autenticidad, el esfuerzo constante y el respeto por nuestras raíces. (...) Es un honor poder acompañar a Carolina en esta etapa, sabiendo que compartimos una misma visión: la importancia de mantenerse fiel a nuestros orígenes mientras miramos hacia el futuro", indica.