Una vez oficializado por parte de la Real Federación Española de Fútbol la finalización del curso 2019/20 en la Primera Iberdrola y planteado lo que será el próximo, el futuro comienza a esclarecerse para los clubes. Y con ello, se dará pistoletazo de salida a muchas transacciones de mercado.
El mercado de verano es un momento crucial para los clubes y el trabajo que se realice en él determinará en gran medida el devenir del club a lo largo de la competición. Por lo que, tener buen ojo y acertar en las incorporaciones se antoja fundamental.
El próximo periodo de traspasos tendrá sus peculiaridades debido en gran medida a la situación que atraviesa la población mundial con respecto al COVID-19. Dicha circunstancia no solo afectará en lo económico sino también en algunos mercados de fichajes. Para los clubes españoles sería un riesgo firmar a futbolistas lejos de Europa puesto que según la circunstancia de cada país, podrían tener complicado desplazarse. Por lo que, tener buen ojo, se antoja más importante que nunca.
Uno de los mercados que podría verse afectado es el sudamericano. El Sevilla FC Femenio suele acudir con frecuencia a este caladero de futbolistas especialmente desde la llegada del técnico argentino, Cristian Toro. Del mismo modo, el norteamericano. Los clubes no quieren correr el riesgo de firmar a una futbolista afincada en dichos países dada la incertidumbre existente en la evolución de la situación por el coronavirus.
Por consiguiente, para ir sobreseguro, el mercado nacional tendrá más peso a la hora de confeccionar las plantillas de cara al ejercicio 2020/21. Éste se ha convertido en una prioridad para la mayoría de clubes.
Por otro lado está el aspecto económico. La crisis provocada por el coronavirus podría mermar a los clubes. Lo que inevitablemente les llevará a adaptarse a la situación. No obstante, todos estarán en la obligación tras la firma del convenio colectivo en el mes de febrero de ofrecer un sueldo que como mínimo esté en los 16.000 euros brutos anueles si están a jornada completa y 12.000 euros brutos anuales si están a tiempo parcial.