Jorge Cordero y
Enrique Ortiz, las cabezas visibles de la dirección deportiva del
Cádiz CF, siguen trabajando de cara al inicio de mercado de fichajes que se abre el día 1 de enero.
Manuel Vizcaíno, presidente del club, anunciaba como mínimo tres fichajes, y las prioridades son un delantero, un extremo para la banda izquierda y un pivote de contención. Hay varios nombres encima de la mesa:
Luuk de Jong,
Gonzalo Escalante,
Abel Ruiz y desde este lunes
Youba Diarra, maliense de 23 años está a prueba en la ciudad deportiva Bahía de Cádiz.
Uno de los deseos de la afición ha sido siempre
Manu Vallejo. El canterano, natural de Chiclana de la Frontera,
se marchaba al Valencia CF en julio del año 2019 por unos 5,5 millones de euros. Desde aquel momento, los aficionados del submarino amarillo han soñado con el regreso del atacante. Ha sido una opción complicada, ya que el club valencianista querría sacar rentabilidad económica por un futbolista por el que pagaron un buen montante. La realidad es que el gaditano no cuenta para Bordalás, que lo ha usado siempre como un revulsivo.
Ha jugado solo 82 minutos en ocho partidos, mientras que en las dos eliminatorias de Copa del Rey suma 45 minutos.
Según ha podido saber ESTADIO Deportivo, Manu Vallejo no quiere venir al Cádiz cedido hasta el final de temporada. La idea del futbolista sería poder rescindir contrato con el Valencia para poder firmar a coste cero durante varias temporadas con la entidad gaditana. Esta situación parece complicada, ya que el jugador
tiene contrato con el club valencianista hasta junio del año 2024 y por otro lado, Manuel Vizcaíno no estaría dispuesto a pagar traspaso por un futbolista que fue vendido hace dos años. Los gaditanos querrían reproducir la misma operación del pasado verano con Rubén Sobrino, que tras rescindir con el Valencia, pudo fichar a coste cero por los andaluces.
Por lo tanto,
el regreso del canterano al Cádiz Club de Fútbol se complica. A pesar de que el deseo del futbolista siempre ha sido jugar con el equipo que lo vio crecer en Primera división, las diferencias económicas, insalvables en estos momentos, dificultarían que el chiclanero vuelva a casa. En el caso de que finalmente pudiera fichar por los gaditanos, el jugador no querría ser considerado un delantero, ya que se se ve más como un jugador de banda, posición en la que tuvo un gran irrupción en el Cádiz.