El Almería piensa ya desde hace semanas en el proyecto de la próxima temporada, en la que tratará de regresar por la vía rápida a LaLiga EA Sports. Y para ello, la primera piedra debe ser la elección del nuevo entrenador, algo que no está muy lejos de producirse sobre el papel.
Al tiempo que rastrea el mercado en busca de refuerzos con experiencia en Segunda división, como Pablo Insua (Sporting de Gijón) o Stoichkov (Eibar), el club andaluz ha detenido el casting de técnicos y ya hay un favorito sobre la mesa: José Rojo Pacheta.
El burgalés, de hecho, ya estuvo cerrado el pasado verano, pero a última hora, desde las altas esferas se optó por un giro de timón que condujo a Vicente Moreno. Ahora, en cambio, parece que no ha dudas al respecto. Se han manejado más nombres, pero el ex del Villarreal, donde no tuvo una grata experiencia esta campaña, se ha colocado como el primero de la lista.
La opción de seguir confiando en Pepe Mel ha tenido en realidad poco recorrido, a pesar de su buen hacer en estas jornadas, al igual que la posibilidad de ‘repatriar’ a Francisco Rodríguez, algo que no entraba en los planes de los dirigentes.
Sí se ha tanteado, al igual que se hizo antes de contratar a Gazika Garitano, la posibilidad de volver a firmar a Rubi, pero el catalán está decidido a entrenar en Primera división y es uno de los candidatos para sustituir a Jagoba Arrasate en el banquillo de Osasuna.
Por su parte, otro técnico que se vigila desde hace tiempo es Rubén Albés, pero esta vía ha perdido fuerza tras los malos resultados que llevaron a su destitución en el Albacete, aunque cuenta con una propuesta del Sporting para seguir en la Categoría de Plata.
En este escenario, Pacheta es el que más convence. Sólo falta que Tuki Al-Sheikh, que a la postre es quien tiene la voz cantante en este asunto, dé su visto bueno, según informa La Voz de Almería.
Ya el pasado verano tuvo la potestad para elegir al entrenador y dijo ‘no’ al burgalés. Pero se espera que en esta ocasión todo sea diferente. Su experiencia en Segunda división y sus ascensos a Primera con el Elche y el Valladolid son un aval que parecen suficientes para contar con el OK del propietario del club.